Diferentes tradiciones, un mismo espíritu
A pesar de ser una tradición fundamentalmente católica, la Navidad llega a todos los rincones del mundo aunque de una forma muy diferente. Tradiciones, creencias, colores, comidas...todo cambia según en el lugar en el que se esté.
Decenas de países celebrando a la vez una tradición milenaria. Ciudades repletas de luces y cuya decoración refleja su forma de ser. El mundo entero se convierte en un destino de visita para comprender y comprobar que hay tantas maneras de celebrar estas fiestas como formas de sentir el espíritu navideño. La Navidad en España es bien conocida por todos: las calles se iluminan con luces de colores, las plazas se
llenan de mercadillos con productos típicos, las familias se reúnen en Noche Buena (24 de diciembre) con la misa del gallo a las doce de la noche, en Navidad (25 de diciembre) y el 31 de diciembre para despedir el año.
Comidas típicas como cordero, lombarda, pavo, nueces, turrones y mazapanes se degustan en esas fechas sobre las mesas adornadas con flores de Pascua.
Estas fechas tan señaladas, muchas personas las viven fuera de sus países por diferentes motivos, y en La Rioja, hace años que las disfrutan desde aquí colectivos provenientes de Bolivia, Colombia, Ecuador, los más numerosos, así como peruanos, argentinos o rumanos. Desde su perspectiva vamos a hablar de cómo viven sus tradiciones desde la lejanía y el recuerdo.
“La navidad en Colombia es una fecha para estar en familia”, así de clara se muestra Fabiola Montes, nacida en Medellín y propietaria de un locutorio en Logroño. En su casa procuran mantener sus costumbres en La Rioja “desde el día 16 de diciembre hasta el 24, comienza en mi país la Novena del niño Jesús, una tradición que solemos practicar y que inculcamos a los más pequeños de la casa”.
Para Miguel Ángel Cueva, ecuatoriano y residente en Logroño donde trabaja como repartidor desde hace tres años, “lo que más me ilusiona es el árbol de Navidad ya que para los ecuatorianos, es el símbolo más importante, intentamos decorarlo lo más bonito posible y lo ponemos como una semana antes de Nochebuena”. Otra de las costumbres ecuatorianas que reconoce mantener es “el pavo que se cena el día 24 y el café con ‘tamal’, una especie de empanadilla frita rellena de maíz molido, carne y verduras”, es su desayuno navideño.
Hasta en las recetas recuerdan sus países, “en Perú se come panetone que es una especie de pan dulce con chocolate, incluso aquí encontramos traídos de Perú” señala Javier Cruz, presidente de la Asociación de Peruanos residentes en La Rioja (APRELAR). Reconoce que le gustan la cabalgata y los Reyes Magos, “porque en nuestro país no es costumbre celebrarlos”. De lo que sí no se olvidan es de adornar sus casas con el belén “cuando vivíamos en nuestro país lo poníamos con nieve a pesar de que ahora es verano, nos encanta la navidad aquí con frío”.
El frío y sobretodo la nieve, es el fenómeno que más impacta a los latinoamericanos residentes en España en general, porque en sus países, como en el caso de Argentina “se viven las navidades en verano con temperaturas de hasta 35 grados”, dice Analía Padilla, una cordobesa (Córdoba, Argentina) propietaria de una empresa de limpieza y residente en Navarrete. En relación al menú navideño, reconode “no acostumbramos a comer pescados y mariscos”, como buenos argentinos en su mesa no faltará este año “platos típicos argentinos a base de cochinillo asado, pan dulce o ensalada de frutas”.
Lo contrario de las temperaturas cálidas, sino más frías que en España ocurre en Rumanía “En Teleorman, mi pueblo natal, nieva durante todo el invierno y me cuesta mucho acostumbrarme a que las Navidades no sean aquí tan blancas ni frías, cuando era pequeña, el día 25 quedábamos todos los niños para hacer muñecos de nieve y después nos íbamos a la iglesia a cantar villancicos” añora Geta Ducuta, una rumana dedicada en la capital riojana al cuidado de personas mayores.
Para ella serán sus primeras navidades en La Rioja y le llama especialmente la atención “el belén gigante que se monta en el Ayuntamiento”. “Estas fechas son muy especiales para nosotros y el nacimiento del niño Jesús es toda una celebración, aquí me parece que en España se viven de una forma ‘más festiva’, que no hay el espíritu religioso que los rumanos tenemos”.
Se vivan con fervor religioso o con ánimos más profanos, es curioso como en estos días todo el mundo empieza a hablar más de amor, de unión, de fraternidad, añoranza, solidaridad...sentimientos que nos unen a todos independientemente de donde provengamos. Igual que los deseos para el nuevo año, los de estos protagonistas hablan de salud para todos, reencuentros soñados, paz y trabajo para todos…Y los tuyos? Nuestro deseo desde Rioja2 es que los sueños de todos se hagan muy pronto realidad. ¡Feliz Navidad!.
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