El Alfaro, en caída libre

0.- Alfaro: Gonzalo, Javi Tres, Txitxo, Santamaría, Labarta, Uriz (Cesar Remón, m.67), Eransus, Guembe, Ibai (Asuirmendi, m.64), Sola e Israel Losa (Gurria, m.65).

2.- Vecindario: Roberto, Alex, Dorta, Salud, Fran, Zubillaga, Candelas, Poncho (Azpilicueta, m.81), Rubén, Sosa (Joni, m.78) y Koke (Yoldi, m.64).

Goles: 0-1: M. 59: Sosa. 0-2, M. 84: Zubillaga. Arbitro: Rebollo González (catalán). Mostró cartulina amarilla a los locales Guembe y Eransus; y a Alex, Fran, Kike y Rubén del vecindario, a este último en dos ocasiones por lo que tuvo que abandonar el campo en el minuto 76.

C.D. ALFARO 0 - VECINDARIO 2

El C.D. Alfaro no pudo con su rival, el Vecindario, que se llevó este domingo los tres puntos de Alfaro gracias a su contundencia y a su manejo del partido, sobre todo en el segundo tiempo, todo lo contrario que su rival, el Alfaro, muy nervioso y espeso durante todo el choque.

El partido enfrentaba a dos equipos con objetivos diferentes, la permanencia en el caso de los riojanos y acercarse a los primeros puestos en el de los canarios. Pero por encima de ese dato y de cualquier diferencia entre las plantillas, el choque era una reválida para el Alfaro, que no conoce la victoria todavía en su campo y que debe hacerse respetar en él si aspira a seguir en la categoría.

Pero con partidos como el éste no lo conseguirá. En todo momento evidenció que se encuentra en una situación delicada -cuatro derrotas consecutivas- y sus jugadores se comportaron en muchos momentos como si el balón les quemase.

En esa dinámica, y aunque tuvo todo un periodo entero para serenarse, en cuanto llega el primer contratiempo el equipo riojano se da por perdido, se viene abajo es incapaz de remontar. De eso se valió el Vecindario, que marcó muy pronto tras el descanso y resolvió el choque. Y lo hizo a pesar de que, en teoría, el conjunto canario tampoco pasa por un buen momento, por los problemas económico que acucian a su plantilla.

No obstante también es cierto que el Alfaro trató de cambiar su destino desde el inicio del partido; saltó al campo muy motivado y ya en el minuto 3 Sola dispuso de un “mano a mano” ante Roberto que solventó el portero canario.

Cinco minutos mas tarde Ibai colocó un balón muy bueno en las botas de Sola, pero de nuevo el delantero del Alfaro no acertó en su control; y en el minuto 18 fue Israel el que se acercó al área del Vecindario en una acción individual, aunque su pase a Eransus -que estaba solo- fue cortado por la defensa visitante.

Eran demasiadas ocasiones perdidas para un equipo tan presionado por la necesidad de ganar y le pasaron factura. A los veinte minutos de partido el Vecindario asentó mejor la posición de sus jugadores y trenzó un sistema defensivo que los jugadores riojanos ya no supieron romper.

De hecho, el Alfaro ya no volvió a acercarse al área canaria, mientras que el Vecindario lo hizo en tres ocasiones, de las que las más claras acabaron con disparos de Sosa (minuto 34) y Candelas (31), que tuvo que desviar a córner Gonzalo. En la reanudación el Alfaro volvió a ser el más agresivo al saltar al campo y de nuevo Sola, en el minuto 46, realizó una buena jugada sin llegar a acertar en el último momento.

Pero al contrario que antes, el equipo local no tuvo margen para mejorar porque cuando trató de asentarse más y volver a ser el dominador del encuentro le llegó el 0-1. Las continuas imprecisiones del Alfaro deparaban muchos balones cómodos para los jugadores del Vecindario, que poco a poco empezaban a comprender la debilidad de su rival.

Así en el minuto 55 Sosa dio el primer aviso serio, con un gol anulado por un riguroso fuera de juego; y en el 59 de nuevo el delantero centro del Vecindario recibió un buen centro de Pocho y lo culminó con un disparo ajustado a la derecha ante el que no pudo hacer nada el portero riojano. El entrenador del Alfaro, Patxi Bronte, trató de evitar que ese gol fuese definitivo y dio entrada en el campo a tres jugadores veteranos y ofensivos, Asurmendi, Gurria y Cesar Remón, aunque sólo este último aportó cosas positivas.

Para cuando entraron en el campo los tres el gol de los canarios pesaba ya como una losa en la frágil moral de los riojanos y el Vecindario jugaba muy cómodo. Tanto que empezó a buscar la “sentencia” del choque al contragolpe, aunque tardó hasta el minuto 84 para conseguirlo, en una jugada de Zubillaga, que recibió solo y ajustó un fuerte disparo al poste derecho de Gonzalo.

Con todo perdido el Alfaro trató de “lavar” su imagen y hasta creó dos jugadas de cierto peligro, por medio de Sola y de Remón, pero ni sus acciones tuvieron fruto ni su equipo logró despejar la imagen de un conjunto que está en caída libre.