El debate de la crisis

Las intrigas de CSI parecen interesar más a los españoles que las propuestas de los candidatos al Parlamento Europeo. Con una media de 2,65 millones de espectadores, el primer cara a cara entre Mayor Oreja y López Aguilar abría la carrera electoral que durará hasta el próximo 7 de junio.

Los temas que fueron protagonistas del debate ya estaban acordados de ante mano por los equipos de cada candidato, y se dividieron en cuatro grandes bloques. El primero fue, como no podía ser de otro modo, la crisis económica. Las cifras de desempleo y la singularidad con la que España está viviendo la crisis fueron las principales líneas que siguió el discurso del popular Jaime Mayor Oreja. Por su parte, Juan Fernando López Aguilar justificó el actual momento de crisis aludiendo a la crisis global, que está viviendo también toda Europa, y que está motiva por un modelo económico neoliberal y políticas ultraconservadoras.

Además, el candidato socialista acusó a los populares de haber generado, durante su último gobierno, la burbuja inmobiliaria que ha traído una de las mayores cifras de desempleo en el sector de la construcción, en la actualidad. López Aguilar se mostró optimista ante la salida de la crisis y no dudó en acusar al candidato popular y al resto de su partido de “ayudarse del paro para ganar su batalla contra este gobierno”, al igual que han utilizado el accidente del Yak-42 y el 11-M, según señaló el socialista.

El paro siguió presente en cuanto se pasó al siguiente bloque de políticas sociales. Jaime Mayor Oreja señaló que su mayor y única prioridad era la política de crear empleo. Según declaró el popular, los jóvenes son el segmento más importante de su política, por lo que prima un nuevo proyecto educativo que brinde las mismas oportunidades que ya tienen los jóvenes europeos. Un proyecto, que como Mayor Oreja afirmó: “Sea una vuelta a los valores: al mérito, a la autoridad del profesor, ...”

Ante esta declaración López Aguilar se apresuró en contestar a su adversario: “Sus valores no son los mayoritarios ni en España ni en Europa”. Frente a la propuesta popular, el candidato del PSOE presentó su iniciativa de trasladar el modelo social implantado por los socialistas en España al resto de Europa.

Mirada al pasado

El siguiente bloque, el de derechos y libertades, tuvo como protagonistas a la dictadura franquista, ETA y, como no, la nueva ley del aborto. López Aguilar recordó la oposición del PP ante políticas sociales como los permisos de maternidad y paternidad, el aborto o el matrimonio homosexual, y tachó a Mayor Oreja de “activista contra los derechos y libertades”, de estar a la derecha de la derecha.

Para defenderse de esta acusación, el popular no tardó en recordar su papel dentro de la transición en el País Vasco, “nos jugamos la vida para que la democracia fuese una realidad”.

El último asalto, en el que el tema principal era el papel de Europa en el mundo, se basó en una nueva alusión de Mayor Oreja al paro, mientras que López Aguilar recordaba la figura de Obama como cambio de una etapa nefasta en el mundo, en la que las guerras preventivas contaban con el apoyo del gobierno popular de José María Aznar.

Sin embargo, aunque tuvieron la oportunidad, ninguno de los dos candidatos de los partidos mayoritarios españoles mostraron cuál era su programa para Europa, ni cuáles serían sus posibles alianzas, ni nada que pudiera calificarse de estrategia comunitaria. Habrá que esperar al próximo día 3, cuando se enfrenten en un nuevo debate los candidatos de La Izquierda, PP, PSOE, Coalición por Europa y Europa de los Pueblos.