Francia juzga a la etarra acusada de trasladar el coche-bomba que mató a un Mosso d'escuadra

El Tribunal de lo Penal de París abre hoy el juicio contra la presunta miembro de ETA Laurenxa Beyrie, de nacionalidad francesa y acusada de haber trasladado desde la localidad gala de Pau el coche-bomba que costó la vida al Mosso d'Esquadra Santos Santamaría Avedaño, el 17 de marzo de 2007 en Rosas (Girona). Beyrie ya fue condenada en febrero de 2007 a diez años de reclusión por asociación de malhechores con fines terroristas.

La presunta miembro de ETA fue detenida el 12 de diciembre de 2001 en la localidad gala de Auch, junto con otros tres terroristas. En relación con ese atentado fueron detenidos otros dos etarras, Eider Pérez Aristizabal, arrestada en Rentería, y Aitor Olaizola Baseta, en Irún. Los dos formaban parte del “comando Sugoi” y fueron acusados de participar en el atentado contra el Hotel Montecarlo de Rosas (Gerona) en el que resultó muerto Santos Santamaría.

Tras recoger el vehículo en Perpignan (Francia), cargado con 90 kilos de exposivos, fue conducido por Eider Pérez, mientras que Aitor Olaizola realizó las labores de lanzadera. Posteriormente lo aparcaron ante el hotel y activaron sus dispositivos para su explosión a las 23.00 horas.

Después, los presuntos terroristas, que habían estado en la costa catalana recabando información sobre instalaciones hoteleras y regresaron en motocicleta que él había utilizado como lanzadera.

La Policía española sospechaba que Beyrie, detenida junto al considerado jefe de cursillos de ETA, Juan Ramón Carasatorre, y José Ramón Lete, y una ciudadana francesa, podría haber trasladado desde Pau el coche bomba que los “tedax” desactivaron en Sevilla el último día del año 2000.

Según las investigaciones, Beyrie alquiló el piso de Toulouse registrado en la operación que supuso el hallazgo de un polvorín de ETA en Pau con más de una tonelada de explosivos, en el que aparecieron datos sobre el referido coche bomba, así como matrículas para doblar y listados de objetivos terroristas.

Las investigaciones apuntan que viajó en varias ocasiones a Madrid para supervisar la campaña del comando que actuaba en la capital de España e indicarle donde debían recoger el material por lo que tendría un alto grado de responsabilidad en el aparato logístico-militar de la banda.

Entre los cometidos de Beyrie estaban el de enlace de la organización con el comando Madrid que dirigía Ana Belén Egués, desde meses antes de la ruputra de la tregua hasta que cayó el grupo en noviembre de 2001.

Natural de Bayona, alquiló varias viviendas que utilizaron los etarras entre ellas la de Toulouse donde se hallaron más de mil fichas de objetivos para atentar. También alquiló una bajera en Auch y otro piso en Toulouse y el caserío de Serres Castet, donde se hallaron una tonelada de explosivos y se fabricaron los coches bomba de Logroño, Gandía, Guetxo y Sevilla.

Beyrie procede de Gazteriak, la versión gala de Jarrai antes de que las dos organizaciones se fusionaran en la formación Haika que ilegalizó el juez Baltasar Garzón. En España estaba acusada de participar en los preparativos, aunque no en la acción inmedidata del mencionado atentado con coche-bomba.