“Kartika debe apelar”

La sentencia que condena a Kartika, una mujer de 32 años y madre de dos hijos, a recibir seis latigazos por beberse una cerveza ha levantado fuertes críticas en la comunidad internacional y entre las principales asociaciones de defensa de los derechos humanos. Esta aplicación de las leyes islámicas en un país como Malasia, tradicionalmente más moderado, ha provocado la intervención del primer ministro malasio.

Najib Razak, primer ministro de Malasia, ha pedido a Kartika Sari Dewi Shukarnor que apele la sentencia que la condena a recibir seis latigazos después del mes de Ramadán. El primer ministro considera que “Kartika debe apelar en lugar de pedir el castigo tan rápidamente”. En declaraciones a los medios de comunicación en la ciudad de Putrajaya, la capital administrativa de Malasia, Razak aseguró que “las autoridades son sensibles por la implicación de este castigo”.

Kartika Sari Dewi Shukarnor, madre de dos hijos, se convertirá en la primera mujer del sureste asiático en ser azotada. En lugar de apelar la sentencia, ella misma ha aceptado la condena e incluso ha pedido que el castigo se aplique en público.

Además de los seis latigazos, Kartika ha sido condenada a pagar una multa. Ayer fue puesta en libertad provisional hasta que reciba el castigo, que según las autoridades se aplicará cuando termine el Ramadán, dentro de casi un mes.