'La ONG que yo quiero'

Las ONG que trabajan a favor de grupos marginales como personas drogodependientes, prostitutas y reclusos son las menos valoradas por los ciudadanos, según se desprende del estudio 'La ONG que yo quiero', elaborado conjuntamente entre la Fundación Adecco y Achalay España.

En el lado opuesto se encuentran aquellas ONG que trabajan con niños y jóvenes, personas con discapacidad, enfermos y personas mayores, mientras que en el 'intermedio' de esta clasificación aparecen las asociaciones que colaboran con mujeres con responsabilidades no compartidas, víctimas de violencia de género, personas sin hogar e inmigrantes.

Respecto a los ámbitos de actuación, los encuestados se decantan por aquellas ONG relacionadas con la educación, la salud, la pobreza y la defensa de los derechos humanos, frente a las que optan por la globalización y el cambio climático, que son los menos valorados.

Por ámbitos geográficos preferidos para colaborar, África [35%], Sudamérica [23%] y Asia [14%] son los lugares más votados. Los organizadores del estudio destacan que, a pesar de que algunos países de Asia se encuentran entre los más pobres del mundo, este continente se encuentra en la mitad de la tabla.

Además, el 21 por ciento de las personas encuestadas prefiere materializar su ayuda en aportaciones económicas, aunque también se valora positivamente el voluntariado profesional [un 18%] y la cooperación internacional [16%]. Asimismo, un 58 por ciento de los encuestados con empleo declara que su empresa está involucrada en programas de acción social con ONG.

El documento también constata que la transparencia es el principal valor que debe tener una ONG en opinión de los encuestados, que también citan aspectos como la humanidad, la profesionalidad, la eficiencia, el entusiasmo, la solidaridad y la búsqueda de dignidad y justicia.

Según datos ofrecidos por la Asociación Española de Fundraising, el 11 por ciento de la población española colabora económicamente, ya sea de forma regular o puntualmente, con causas sociales, lo que se traduce en cuatro millones de donantes que destinan un total de 782 millones de euros anuales.

Además, las personas con edades comprendidas entre los 45 y los 50 años, con estudios superiores, casados o que viven en pareja, y de clase social media o media alta constituyen el perfil del donante en España.