La UE, más cerca de un acuerdo sobre la protección de mujeres maltratadas

La adopción de una orden europea de protección contra la violencia de género parece una posibilidad cada vez más cercana después de que la Eurocámara haya aprobado este mismo miércoles la propuesta presentada por varios ministros europeos. La votación ha permitido al proyecto avanzar gracias a los 63 votos que ha recibido a favor (frente a un solo voto en contra y tres abstenciones) entre las comisiones de Derechos de la Mujer y de Libertades, Justicia e Interior.

Este proyecto había sido presentado durante la presidencia española de la Unión Europea (UE), el primer semestre de este año, pero fue desestimado por la Comisaria de Justicia y Vicepresidenta de la Comisión Europea, Viviane Reding, aludiendo que el planteamiento jurídico no era el adecuado. Además, en junio siete países (Alemania, Reino Unido, Austria, Letonia, Eslovenia, República Checa y Hungría), se opusieron a este proyecto español esperando que fuera la Comisión Europea la que presentara un plan para 2011.

Con el acuerdo alcanzado se prevé llegar a adoptar una euroorden con la que se regularían los casos de violencia de género, pero también se protegería a las víctimas de crímenes de honor, mutilación genital, de crimen organizado y matrimonios forzosos y a las víctimas del terrorismo.

Para la socialista Carmen Romero, con esta euroorden se pondrían sobre la mesa cuestiones que siguen siendo “tabú” y se lograría realizar estimaciones más precisas sobre temas sobre los que ahora no existen estadísticas oficiales, como la cantidad de mujeres que mueren víctimas de violencia de género (cifra que una ONG de Viena calcula en 2.500 al año en Europa).

Tanto Romero como la eurodiputada del PP Teresa Jiménez-Becerrill, quien ha asegurado que “hoy es un gran día para las víctimas de la violencia de género en Europa”, esperan que el acuerdo sobre la orden pueda alcanzarse antes de fin de año. Esto sería ahora más fácil teniendo en cuenta que el cambio de gobierno en el Reino Unido habría propiciado un cambio de postura de este país, por lo que los Estados en contra serían minoría.