El aparcamiento de Gran Vía se retrasa hasta verano

El estacionamiento subterráneo que se construye bajo la Gran Vía retrasará su apertura hasta el próximo verano, por algunos problemas técnicos inesperados surgidos durante las obras, como la presencia de más rocas o agua. Así lo avanzaron hoy el alcalde de Logroño, Tomás Santos, y el responsable de la constructora, José Martín, tras una visita que esta mañana realizaron a los trabajos.

Durante la visita, Santos explicó que “estamos cumpliendo el acuerdo con la constructora, tal como estamos haciendo con todos los contratos suscritos por el anterior equipo de Gobierno municipal, con lo que damos seguridad jurídica a las empresas”.

El primer edil logroñés recordó que “este aparcamiento ha sido una obra tremendamente polémica, no por el trabajo de las empresas, sino por la forma en la que se realizaron las gestiones sobre los proyectos y los trabajos”.

“Con todo -recalcó- estamos ante una realidad que está funcionando, y que debe acabar, en interés de todos, Ayuntamiento, empresa y ciudadanos, con la mayor celeridad posible”.

En este sentido, Santos hizo hincapié en “la extraordinaria disposición” de la empresa y la “colaboración completa” con la constructora por parte municipal “para llevar adelante estos trabajos”. Como principal novedad, destacó el espacio que se ha dejado, entre la Gran Vía y Avenida de La Rioja, para la construcción de una ludoteca “que es un detalle importante para el centro de la ciudad”.

Con todo ello, calculó que el estacionamiento al completo podrá estar en funcionamiento “para el próximo verano”. A ello sumó que la previsión municipal apunta que, para antes de finales de este mes, se podrá contar con la puesta en marcha de los contenedores soterrados de la zona.

Por su parte, José Martín incidió en que el retraso en los trabajos se ha debido a que “se ha encontrado muchas rocas y agua que no estaba prevista”, a lo que unió que “sólo se ha podido usar una rampa, con lo que no se han podido meter varias máquinas a la vez por varias entradas”.

Respecto a las plazas, apuntó que, del total de entre 1.780 y 1.790 con que cuentan los dos tramos del estacionamiento “se han cumplido todos los compromisos con los vecinos, todos los que la habían pedido y cumplían los requisitos, tienen plaza”.

Posteriormente, y ante la presencia aún de plazas libres, se abrió una nueva posibilidad para los solicitantes “de un ámbito de unos 300 metros” de influencia del aparcamiento. En este momento, quedan entre 60 y 70 plazas todavía sin vender, por lo que se está llamando “a gente que está en la lista de peticionarios”.