Paso a paso

La Semana Santa en Logroño está declarada de Interés Turístico Regional por la calidad y emotividad de sus procesiones, y ello se nota porque la capital nos regala estos días estampas deliciosas, bulliciosas, emotivas...instantes a cada paso protagonizados por los pasos, el gentío, los sabores, y los aromas especiales que nos envueltos en un halo especial de misticismo.

Café Moderno y cofrades

La ciudad despierta engalanada con cartelería y otras referencias gráficas alegóricas de estas

pascuas adornando algunas calles como Portales, en el Casco Antiguo hay más trasiego de gente que de normal y los locales y visitantes apuran hoteles y terrazas como la de la de la cafetería Moderno, 95 años de historia, testigo de la historia de Logroño, icono y parada obligatoria en el primer café de la mañana.

En su terraza encontramos la primera estampa tradicional del día, unos hermanos cofrades comparten unas cervezas en estos días especiales para ellos, donde fervor y compañerismo se dan la mano. Pertenecen a la Cofradía del Nazareno, Víctor uno de ellos nos explica su intensa actividad de la semana “la disfrutamos estando en hermandad y en los actos religiosos sacando los pasos, entre ellos el Nazareno oficial grande del Miércoles Santo en el Encuentro, el Nazareno antiguo el Jueves Santo en la procesión de Jesús camino del Calvario, y el Viernes Santo hacemos la procesión del Santo Entierro con el resto de cofradías de Logroño”.

Portan los pasos, pero también hay tiempo para disfrutar de otra manera “tomamos el vermut, cenamos juntas las familias con los niños...hacemos una gran familia todos estos días, nunca nos vamos de vacaciones y nos gusta vivir la semana santa con fé”, opinión que comparte Jorge, su hijo de 11 años, quien a pesar de su juventud, lo tiene claro, “tengo ganas de tener 18 años y llevar el paso como mi padre, lo mejor de la semana santa es quedarte aquí, no lo cambio por nada”, afirma con desparpajo. Su papel de momento no está bajo las imágenes pero apunta maneras “otros niños tocan los tambores y otros llevamos la vara y vamos

por delante, nos juntamos todos y me encanta estar con mis amigos cofrades“, explica con un entusiasmo que contagia ” y decoramos el paso con claveles para que quede bonito“.

Con la instantánea de la alegría e inocencia de Jorge en la mente nos perdemos por las calles del Casco Antiguo hasta un costado de la iglesia de Santiago, en cuyo pavimento se ha encastrado el singular Juego de la Oca con motivos jacobeos, por lo que se conoce popularmente como

Plaza de la Oca. Un peregrino almuerza en la Fuente del Peregrino, otros prosiguen su escalada hacia la

Iglesia y dos amigas se afanan a recoger instantáneas. Charo ya había estado en Logroño, una ciudad que reconoce “gustarle mucho” y, que mejor que aprovechar la Semana Santa logroñesa para volver con su amiga Aurora, ambas son de Toledo y, a pesar del tiempo, “la verdad que aquí hace frío”, comentan, quieren disfrutar de estas fechas desde un punto de vista religioso pero sobretodo artístico “estamos haciendo el recorrido de monumentos e iglesias, es una oportunidad muy buena para encontrarlas todas abiertas”, explican, todavía tienen un largo fin de semana por delante “el lunes nos vamos”, tiempo suficiente para completar el viaje con una “excursión a Valvanera”.

Vino y pinchos

Seguimos el recorrido por el Puente de Hierro de Logroño, que nos conducirá a una de las catedrales del vino de la capital riojana, las Bodegas Franco Españolas, otra de las visitas fuertes de los turistas esta fechas, que no pierden ocasión de profundizar en la cultura del vino, inherente a la gastronomía riojana.

A las puertas, antes de comenzar la visita guiada, encontramos dos jóvenes parejas calentando motores cámara en mano, a Julio, Patricia, María y Hector, no quieren perderse una instantánea de este recorrido por el norte de España, “somos de Valencia y hemos venido a conocer la historia del vino, estamos de turismo enológico al margen un poco de la Semana Santa”, nos llamaba bastante esta zona y seguiremos por el Norte por Pamplona, San Sebastián, explican. Recorremos con el grupo y otros visitantes esta mítica bodega bañada por el río Ebro, fundada en 1.890 y con capacidad para 15.000 barricas, sorprendiéndonos el paseo por sus calados que brindan encantadores espacios donde la historia se funde con el arte de hacer vino.

Al final del camino nos obsequian con una copa de reserva y un aperitivo, y decidimos continuarlo

de vuelta al Casco Antiguo a la Senda de Los Elefantes, como se conoce popularmente a las calles Laurel y alrededores, con ambiente cualquier día del año, pero especialmente en fiestas. Una gran variedad de pinchos, cazuelitas y platos que atraen a turistas del país y muchos extranjeros, asímcomo a pererinos a experimentar la gastronomía riojana abarrotando las calles en una algarabía de sabores y sonidos al juntar las copas, como las de un grupo de Madrid, embriagados por el olor y el sabor de la cocina típica

“a los madrileños nos gusta La Rioja, no es la primera vez que venimos, teníamos mono de buenos pinchos y mejor vino”, comentan animados, “vamos a intentar degustar la mayoría”, aunque los que más nos gustan son “los champis, las bravas y las zapatillas de jamón, y nos han sorprendido los rotos, son cojonudos...”.

“Santos dulces”

Un buen tapeo tiene que ir acompañado de un postre a su altura, Sin salir de la zona, en Portales buscamos la tradicional pastelería 'La Mariposa de Oro', una joya del siglo pasado que ha pasado en manos de generaciones conservando su esencia original y donde Carmen nos obsequia con unos canutillos y milhojas “las estrellas de la casa todo el año, las pastas de té se nos han acabado por hoy”, reconoce. La Semana Santa aromatiza nuestras mesas con otras recetas dulces de estas fechas, buñuelos de viento, torrijas, o la mona de Pascua, ilustrada con los personajes infantiles más populares o, ante la reciente Copa del Rey, con el escudo madridista. Estas delicias se puede degustar en la cafetería y pastelería Viena.

‘Paso a paso. Semana Santa en Logroño’

La Semana Santa de Logroño ha sido declarada de Interés Turístico Regional. Por este motivo, la

Hermandad de Cofradías de la Pasión de la Ciudad de Logroño ofrece una serie de actos atractivos para todos los logroñeses y visitantes que ayuden a dar mayor realce a una de nuestras tradiciones religiosas y culturales más antiguas y de mayor arraigo. Entre ellos, destaca la exposición ‘Paso a paso. Semana Santa en Logroño’, en el Centro Cultural CajaRioja-La Merced. La muestra ofrece al visitante detalles de las diferentes cofradías que conforman la Hermandad, un mundo muy visto pero, no muy conocido, al que pertenecen 3.000 personas en la ciudad de Logroño.

La exposición se divide en espacios diferenciados con un denominador común: las diferentes maneras de ver y sentir la pasión, muerte y resurrección de Jesús de Nazaret y su objetivo es acercar al visitante la forma logroñesa de sentir y vivir la fe. Una devoción que se ha vivido en cada rincón por donde han pasado las procesiones y se ha sentido con las saetas, algunas de

ellas con letras joteras emocionando a los asistentes. La próxima cita con los impresionantes pasos será este Domingo de Resurrección con la Procesión del Resucitado, organizada por la Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén, con salida desde el cementerio municipal y recorrido por la Carretera de Navarra, Puente de Piedra, Avenida de Viana, Capitán Gaona, hasta la Residencia Santa Teresa de Jesús Jornet e Ibars.