Primer revés para Nadal
El español Rafael Nadal cayó derrotado ante el ruso Mikhail Youzhny en la final del Torneo de Chennai, que se ha celebrado en la India, y en donde el tenista mallorquín sufrió un duro correctivo al perder por 6-0 y 6-1. Nadal se mostró muy lejos de su mejor versión y del épico partido que ayer vivió con Moyá en las semifinales, de casi cuatro horas de duración. El manacorí cedió ante el número 19 del año y no pudo apuntarse el que hubiera sido el primer título del curso tenístico.
El número dos del mundo pidió la atención médica (recibió estiramientos en el glúteo derecho) en el segundo set cuando perdía por 4-1, aunque continuó jugando permitiendo así que el ruso, de 23 años, número 19 en la lista mundial conquistara el cuarto título de su carrera, recuperando la racha ganadora de 2006 y 2007, siempre en superficie dura, que le había dado dos victorias sobre el español. El balance entre ambos es ahora de 6-4 favorable a Nadal.
Desde el inicio, el partido fue un auténtico paseo para Youzhny, muy favorecido por el cansancio físico que arrastraba Nadal tras las semifinales de ayer ante Moyá. El español comenzó impreciso cometiendo seis errores no forzados, y con un juego alocado, lejos de lo que Nadal ofrece habitualmente. El manacorí regaló varios puntos al ruso, que apenas sin arriesgar, se puso pronto con las primeras ventajas en el tanteador. De hecho, en sólo 23 minutos, el marcador era ya de 6-0 a favor de Youzhny, que llegó con un nuevo error no forzado -el undécimo- de Nadal junto a la red.
YOUZHNY BARRE A NADAL.
El español sólo había logrado ocho puntos y había alcanzado un bajísimo porcentaje con el primer servicio (56 frente al 80 de su rival). A los 32 minutos fue cuando al final Nadal borró el cero de su marcador y sumó su primer set, logrando el empate a uno y vislumbrando la posibilidad de darle la vuelta al choque, conociendo la vitalidad del insular. Pero a Youzhny le dio igual. Continuó intratable con su derecha, y tras desaprovechar tres bolas de 'break', fue en la cuarta cuando se llevó el segundo juego del segundo set que fue un trampolín para la victoria final.
Tras la mencionada atención médica, el español decidió seguir, pero poco pudo hacer ante un Youzhny que se mostró implacable, feroz, y fortísimo en todos los aspectos del juego. El ruso volvió a romper el servicio de Nadal (5-1) y con su saque remató con un juego en blanco que ilustraba la escasa resistencia que había opuesto el mallorquín tras el importante desgaste ante su amigo Carlos Moyá.
0