El sueldo de las enfermeras riojanas, el cuarto más bajo de España: “hasta 921 euros menos al mes que en Navarra”
Los profesionales de enfermería cobran en La Rioja hasta 921 euros menos al mes que en Navarra; 499 menos que en el País Vasco; 221 euros menos que en Castilla y León y 125 euros menos que en Aragón. Así lo denuncia SATSE que califica de “alarmantemente bajas” las retribuciones de estos profesionales en La Rioja y considera “insostenible la situación porque no refleja en absoluto el valor del trabajo que realizamos”, asegura la secretaria general de SATSE en La Rioja, Patricia Mogena Obispo.
Y es que aseguran que “los datos hablan por sí solos”. El sueldo medio actual de una enfermera del SERIS oscila entre los 1.996 y 2.182 euros, “lo que lleva a La Rioja a ocupar la cuarta posición por la cola en lo que a retribuciones se refiere”, según recoge el Informe ‘Situación actual y estimación de la necesidad de enfermeras en España 2024’, elaborado por el Ministerio de Sanidad. El cruce de datos es aún “más doloroso si nos fijamos en nuestros vecinos. Así, en Aragón, perciben entre 95 y 125 euros más al mes; en Castilla y León, entre 185 y 221; en País Vasco, entre 431 y 499 euros más; y en Navarra, hasta 921 euros más al mes. Es evidente que jugamos en una liga en la que es imposible competir en las mismas condiciones, por ejemplo, para atraer y retener a profesionales en un momento, además, en la que faltan enfermeras y las listas de empleo están agotadas”, recuerda Mogena.
Para la formación sindical esta denuncia “no es una cuestión de cifras sino, sobre todo, de dignidad y reconocimiento”. Es por ello, que SATSE urge al Gobierno de La Rioja a incrementar el sueldo de las enfermeras riojanas a través del incremento de un concepto “que ya existe las nuestras nóminas como es la productividad fija. Actualmente, enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas somos los profesionales sanitarios del SERIS que menos cobramos en este concepto”.
Y es que consideran que esta es una “reivindicación justa. Es fundamental que la administración valore y reconozca el esfuerzo de las enfermeras, especialmente en un contexto de sobrecarga laboral y estrés”.
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