Tiroteos después del asesinato del Jefe del Estado Mayor del Ejército

Al parecer, el sonido de los disparos provenía de la zona donde se encuentran el cuartel general del Ejército, donde fue asesinado anoche Na Wai. El cuartel general de las Fuerzas Armadas quedó parcialmente destruido en un ataque perpetrado con lanzagranadas. Al menos cuatro personas resultaron heridas y tuvieron que ser trasladadas a un hospital, según un testigo.

Las tropas habían acordonado la zona y habían iniciado la búsqueda de los atacantes, cuya identidad se desconoce. Miembros del Ejército ordenaron a dos emisoras de la capital el cese de las emisiones, mientras que la televisión estatal también parece haber dejado de emitir. “Por la seguridad de los periodistas, debéis cerrar la emisora y cesar las emisiones. Es por vuestra propia seguridad”, indicó el portavoz de las Fuerzas Armadas, Samuel Fernandes a los trabajadores de Radio Bombolom, una cadena privada de Bissau. “Vamos a buscar a los asaltantes y a vengarnos”, añadió.

El presidente de la empobrecida nación africana, el ex general Joao Bernardo “Nino” Vieira, fue elegido para el cargo en 2005, pero ya ocupó el poder entre 1980 y 1999 tras un golpe militar, misma forma en que fue depuesto por una Junta Militar de la que formaba parte Na Wai.

A principios de enero, un comando de las Fuerzas Armadas informó de que un grupo de milicianos contratados para proteger al presidente habían disparado a Na Wai, objeto de críticas por parte del presidente del país el ex general Joao Bernardo “Nino” Vieira.

Un miembro de la milicia negó el disparo hubiese sido un intento de asesinato, aunque el estamento militar ordenó la disolución del grupo de 400 hombres reclutados por el Ministerio del Interior como guardia personal de Vieira, después de que el presidente sufriese un atentado en su propia residencia el pasado 23 de noviembre.

Vieira, que sobrevivió al ataque perpetrado con armas automáticas y lanzagranadas, aseguró que el asalto fue realizado por soldados desertores. Guinea Bissau es uno de los países más pobres del mundo y su seguridad se ha visto amenaza en los últimos años por los cárteles colombianos que utilizan su territorio como refugio para almacenar y distribuir la cocaína hacia Europa.