Titín III: “Pienso sólo en el partido de hoy y punto”

Relajado y tranquilo, como es él. Así se siente Aungusto Ibañez, Titín III, pocas horas antes de comenzar el primer partido de cuartos de final de un torneo que le trae muy buenos recuerdos. Hace casi un año el caracolero se ponía la txapela de campeón en una día que no olvidará, el 2 de diciembre. La historia se puede repetir, o no, pero el riojano se siente tranquilo por lo que pueda pasar.

“Yo ahora pienso sólo en el partido de hoy frente a Pablo y punto. Quiero ir encuentro a encuentro e ir pasito a pasito por eso en mi cabeza sólo cabe este primer partido”. Titín reconoce que volver a ganar el Cuatro y Medio sería una gran satisfacción porque es un torneo fetiche para muchos pelotaris. “Nos hemos estado preparando muy duramente para este torneo, aunque con alguna que otra interrupción”. Fisícamente el riojano se encuentra muy bien, “las manos me responden perfectamente y mentalmente estoy a tope”.

Con estas dos bazas jugará este viernes el caracolero, sin ningún tipo de presión. “Siento ilusión por hacerlo bien pero si pierdo me iré con la idea de saber que he hecho todo lo que he podido y si gano será una inyección de energía para afrontar la liguilla con muchas ganas.”

Lo que es seguro es que los nervios no cabrán en la cabeza de nuestro aderezado pelotari. “Yo siempre digo que paso más nervios los días antes de un partido que el mismo día. De hecho, por ejemplo, cuando llega el momento me siento relajado y tranquilo y los nervios los dejo en los vestuarios”.

En cuanto a las costumbres, Titín no tienen manías a la hora de afrontar un partido. “Suelo hacer la misma rutina de todos los días. Hoy iré a buscar a mi hijo al colegio y estaré tranquilamente con mi familia”.

Eso sí, siempre pensando en el partido que va a disputar. Para su primer enfrentamiento tendrá delante a un hueso duro de roer. “Conozco a Pablo y sé que es un rival fuerte. Es un delantero muy rápido al que le gusta la pelea en los cuadros alegres. Por ahí me puede hacer mucho daño”.

Pero lo que sí tendrán los dos en común será el objetivo de adaptarse a un torneo como el Cuatro y Medio, en el que cambia la manera de jugar, predominando los movimientos rápidos y laterales.

Este viernes se verá quien pasa el primer escollo de los temibles cuartos de final de un torneo especial para la mayoría de los pelotaris.