Tres meses de prisión por golpear, ebria, a sus hijas

El titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Logroño ha condenado a un total de tres meses de prisión a una madre que golpeó a sus hijas, mayores de edad, estando bebida. Además, le ha impuesto dieciocho meses de alejamiento de las hijas a una distancia de doscientos metros.

Según relata el fallo, al que tuvo acceso la acusada, de 54 años, sobre las siete de la tarde del 20 de marzo de 2006, se dirigió al establecimiento en el que trabajan dos de sus hijas y les entregó unas cartas de su padre “dando fuertes voces”.

Una de ellas le pidió que saliera del local y que “no gritara”. Entonces, de acuerdo con los hechos considerados probados en la sentencia, la acusada respondió diciendo que le iba a dar “una ostia” que le mataría mientras le golpeaba en una oreja, mano y muñecas.

Las chicas, en el transcurso de la discusión, avisaron a la otra hermana, a la que, al llegar, la madre agarró del cuello. A la tercera, le cogió de la mano cuando intentaba impedir la agresión a la primera.

La acusada, en el momento de los hechos, padecía intoxicación etílica aguda, ya que el alcohol que había ingerido previamente, “en cantidad moderada”, interactuó con el tratamiento de psicofármacos que lleva.

Para el juez, los hechos probados constituyen un delito de lesiones, por lo que se le impone una pena de tres meses de cárcel y la prohibición de acercarse a doscientos metros de sus hijas.