Uno de cada dos residentes vive en un suburbio

El último informe de la Corporación Municipal de Brihanmumbai y del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo [PNUD] afirman que “en todo el mundo, una de cada tres personas vive en un suburbio, pero las cifras son mucho más altas para Bombay, donde el 54,1 por ciento de la población reside en estos barrios, lo que significa que una de cada dos personas en la ciudad de Bombay reside en un suburbio”.

Este tipo de barrio ocupan “el seis por ciento de toda la tierra en Bombay, lo que explica los terroríficos niveles de congestión”, según añade el documento. Nueva Delhi cuenta con un 18,9 por ciento y Calcuta con un 11,72 por ciento de estos territorios.

De este modo, entre un cuarta y una tercera parte de la población urbana del estado de Maharashtra [cuya capital es Bombay], reside en los suburbios de esta ciudad, la más poblada del país. En 2006 y 2007, la ciudad tenía un ingreso per cápita que doblaba la media anual del país, pero, a pesar de esta ventaja, los ingresos de casi el diez por ciento de la población de la ciudad no superan los 8,7 euros al mes, lo que significa que ese porcentaje tiene que vivir con 0,2 euros al día.

El informe del PNUD indica que los pobres que en Bombay se hacinan en los suburbios incluyen inmigrantes, trabajadores de la construcción, vendedores callejeros y mendigos, entre otros.

Las causas de la pobreza urbana se achacan a la ausencia de ingresos, así como a la dificultad para acceder a los servicios cívicos básicos, así como a la calidad de sus viviendas. Aunque el informe especifica que, “no todos los pobres viven en suburbios, y no todas las personas que viven en las zonas definidas como suburbios son pobres”.

La escasa calidad del refugio, el abarrotamiento extremo, el escaso acceso a los servicios públicos, incluidas las instalaciones básicas así como la inseguridad en la propiedad de la tierra en la mayor parte de los casos son los otros marcadores de pobreza, según este informe, que añade que “no ha habido ningún cambio en la condición de los habitantes de los suburbios incluso aunque las zonas que carecen de estos edificios hayan mejorado su calidad de vida”.

Por todos estos datos, en informe concluye que “un residente de un suburbio no se merece una atención descuidada y secundaria, sino una atención centrada, con un tratamiento positivo y una discriminación positiva, para llevarlos a la zona establecida de la ciudad para que puedan contribuir”.