Ayuso y Aznar se unen en un coloquio para dejar clara su sintonía y su rechazo a los indultos

Isabel Díaz Ayuso y José María Aznar vuelven a coincidir un año después para clausurar un curso de verano de la universidad privada Francisco de Vitoria. Una charla que hace un año ya protagonizaron los dos líderes políticos del ala dura del PP de forma telemática y en la que Ayuso llegó a afirmar que la pandemia era “lo mejor” que le había pasado en la vida. Con un panorama completamente diferente, la presidenta de la Comunidad de Madrid y el expresidente del Gobierno se han vuelto a ver esta vez cara a cara para protagonizar un coloquio, moderado por el periodista Vicente Vallés, en el que los indultos a los líderes independentistas en centrado prácticamente toda la charla. Pese a la buena sintonía con la presidenta madrileña, en todo momento, Aznar ha dejado claro que su líder nacional es Pablo Casado, por si había alguna duda. Aunque ha avisado que el modelo Ayuso es el que hay que seguir.

“Es de aurora boreal realmente lo que está pasando. La alternativa a todo eso es el cumplimiento de la ley, la Constitución y el Estado de Derecho. Y es una decisión política de los españoles que, cansados de ser humillados, no están dispuestos a seguir siendo humillados”, comenzaba Aznar, dejando claro que los indultos no le gustan porque, según ha defendido, en España “hubo un golpe de Estado”, pese a que el Tribunal Supremo los condenó por sedición y no rebelión. En su opinión, que no la del tribunal, deberían haber sido condenados por ese último delito.

El expresidente del Gobierno también se ha referido al apoyo de empresarios y obispos catalanes sobre los indultos. Aznar ha asegurado que son días “para apuntar, tener en la cabeza y no olvidar”.

Aznar también ha criticado que el PNV se apunte a “toda esta fiesta” y ha cuestionado cómo llegó el PSOE al poder en 2004 y 2018. Hace 16 años tras el atentado del 11M que el PP quiso atribuir a ETA mintiendo a sabiendas de que había sido el terrorismo yihadista. Para Aznar, artífice de aquella teoría de la conspiración el PSOE ganó las elecciones “utilizando unos ataques terroristas para intentar afectar a la credibilidad del Gobierno”. Y hace tres años, con una moción de censura a Mariano Rajoy “apoyada por separatistas y exterroristas”. El expresidente del Gobierno ha obviado, por supuesto, que el PSOE ganó después las elecciones en 2019 en dos ocasiones.

Aznar ha renegado del diálogo. “No se construye un país nuevo prescindiendo de la otra mitad del país, al menos. Imposible. Se destruye un país”, ha alertado, para añadir que si ése es el camino eso está “condenado a un gran fracaso”. Al ser preguntado cuál es la alternativa que propone el PP a esa vía de diálogo abierta por el Gobierno, el dirigente del PP ha defendido que “la cuestión consiste en respetar y cumplir” tanto la ley como el Estado de Derecho.

Sobre esta cuestión, Ayuso ha asegurado que no va a permitir que se “suban los impuestos a Madrid y que la economía madrileña pague, como el resto de España, lo que están haciendo en Cataluña”. “Porque la independencia es negocio, la independencia es dinero, es una corruptela que lo único que intenta es bajo supuestas identidades crear una división social para después exprimir a España, al resto del país”.

Ayuso culpa a los demás de eclipsar a Casado

La buena sintonía entre Ayuso y Aznar ha quedado patente durante este viernes. Pero para que no hubiera dudas, Aznar ha repetido en varias ocasiones que su líder nacional, el que puede conducir a España a buen término, es Pablo Casado, aunque también ha advertido de que el modelo a seguir es el de Ayuso. “Las elecciones de Madrid han marcado un camino, ese es el camino que esencialmente hay que seguir. Y para Pablo Casado eso es una gran ventaja”, comenzaba Aznar.

“Isabel es una de las personas, como Pablo Casado, con todas las condiciones para un liderazgo brillante”, ha insistido, para asegurar después que la presidenta madrileña “hace lo que tiene que hacer”. “Cuando yo era presidente de Castilla y León, yo lo hice. Y de ahí nació una alternativa nacional. Es la realidad. A un presidente de una Comunidad no se le puede pedir que esté en silencio. Lo que denota un nivel muy bajo son todos aquellos que hay por ahí que no dicen una palabra más alta que otra. ¡Hay que decirlo! ¡Eso es la política!”.

A este respecto Ayuso ha defendido que existe un “interés” en deslizar que con sus declaraciones ensombrece al presidente del PP, Pablo Casado. Pero ha avisado: “Si pretenden dividirme con el presidente de mi partido, generarme supuestas disensiones con él, para que me quede callada, se equivocan”.

“Yo creo que también a veces hay un poco de interés por ensombrecerle a él de manera deliberada. Esta misma semana los dos nos hemos pronunciado de la misma manera acerca de las mismas cuestiones y a mí se me ha puesto en portadas delante de él, cuando hemos dicho exactamente lo mismo. Quien lidera la oposición y quien va a gobernar España en el futuro es él y no yo”, ha manifestado.

Para Ayuso, Casado “no es un hombre de complejos” y ella tiene algunas obligaciones como “mostrar el gobierno que España se está perdiendo”.