La Comisión de Urbanismo acaba de dar su visto bueno al Plan Especial para el fomento de la incorporación de cubiertas verdes en edificios, la herramienta con la que el Gobierno de Almeida busca mejorar la eficiencia climática de la capital empezando por las azoteas. Lo ha hecho con los votos favorables de PP y PSOE, que ha mostrado su apoyo después de un acuerdo alcanzado en los últimos días gracias a la estimación de varias de sus alegaciones.
El plan, que será aprobado de forma definitiva en el pleno de la semana que viene, fue presentado hace unos meses por el área de Urbanismo y busca a través de intervenciones en altura mejorar con ventajosos incentivos la transformación de las cubiertas de los edificios en espacios climáticamente más eficientes. En concreto, se permitirá a las comunidades de vecinos construir áticos para servicios comunes, que no computarán en la edificabilidad máxima autorizada.
La nueva herramienta urbanística podrá ser aplicada sobre los 124.474 edificios de la capital que no poseen actualmente cubierta vegetal y la novedad estriba en que el Ayuntamiento concederá además incentivos económicos a los propietarios que acometan este tipo de reformas, según el acuerdo al que ha llegado el área de Urbanismo con el PSOE, que incluyó esta posibilidad en sus alegaciones al planeamiento.
Fuentes socialistas explican a este periódico que aunque ven la medida como algo “limitado” por su formulación, valoran los esfuerzos municipales por intentar reducir el efecto isla de calor en Madrid, su capacidad de escucha en este tema y que exista el compromiso de incluir una partida económica adicional para que no solo las comunidades de vecinos con rentas más altas puedan acceder a estos cambios, sino que también entren a ellas las de distritos con rentas más bajas y mayor necesidad de refrescar sus entornos urbanos.
El compromiso con el PSOE es que además el Ayuntamiento de Madrid predique con el ejemplo y fomente que en edificios de titularidad municipal se apliquen estas coberturas verdes. Fuentes socialistas explican que dan su apoyo al plan “a modo de voto de confianza” y porque ven con buenos ojos tanto la medida como la proactividad municipal en sus propios inmuebles. También confían en que las ayudas se sustancien de manera clara en el desarrollo de la iniciativa.