“Por primera vez estoy deseando marcharme de Ponzano, es asqueroso vivir aquí”

Mi familia y yo somos de Chamberí de toda la vida. Tengo 45 años y vivo desde hace 10 en un piso que compré en la calle Ponzano, con mi familia. En estos últimos tres años nuestra calidad de vida ha bajado de 100 a 0. Hemos reclamado que nos han puesto un reservado de un local debajo de nuestro dormitorio. Los decibelios no dan para el cierre, pero ellos pueden gritar hasta las 2:30 de la mañana. Yo estoy enferma y pidiendo la incapacidad. No puedo descansar.

Estamos encerrados, no podemos sacar el coche ni a diario ni, por supuesto, los fines de semana, aunque por mi enfermedad sería conveniente respirar aire fresco, un sábado o un domingo con los niños: si salimos con el coche luego no podemos aparcar en esta zona llena de bares donde antes era una calle tranquila. Nos movemos con la moto. Mi moto recién aparcada en un párking de la calle del Ayuntamiento apareció -hace dos semanas- golpeada y tirada por un coche: 600 € de arreglo, pese a que yo no tengo ingresos.

Mi calle está llena de gente por las aceras que salen a fumar y no se apartan, dejan las colillas en los huecos de los árboles, está todo lleno de porquería... el bar de al lado, DeAtun (Ponzano 59), deja toda la basura de pescado fuera de los contenedores a plena luz del día. Desde hace casi un año llevamos desde las 7.30 con las obras de Telefónica con los ruidos y la porquería dentro de las casas y terrazas.

Mi enfermedad se ha visto empeorada por el cansancio psicológico y el no poder salir a la calle. Estamos encerrados en una calle llena de bares, vómitos, ruido, borrachos... los de medioambiente, como el nivel de decibelios no supera, pues dicen que todo es correcto. Y yo mientras con 13 pastillas de medicación. Un barrio que está lleno de tráfico de marihuana que es a lo que huele la calle. Por primera vez en mis 45 años estoy deseando irme de aquí.

Soy votante de Carmena y me alegro de las mejoras que hay, pero nadie nos ampara como vecinos contra la contaminación acústica y demás. Me parece muy mal dar vía libre con nuevas licencias a los propietarios de los bares, a la vez que no se hace nada por los vecinos afectados. Es asqueroso vivir aquí. Cuando antes era una gozada.

Firma: Isabel Muñoz, vecina de Chamberí