El problema estructural del empleo en la Región de Murcia
La Región de Murcia ha perdido 7.800 puestos de trabajo en el último trimestre. Aunque las cifras mejoran lo sucedido el pasado año, solo desde el gobierno regional se muestran optimistas al respecto, mientras que los grupos de oposición y los sectores profesionales son más escépticos respecto al futuro laboral de la Región.
Miguel A. López-Morell, diputado de Ciudadanos, ha lamentado que las cifras de la Encuesta de Población Activa del tercer trimestre del año que ha publicado el Instituto Nacional de Estadística sean muy negativas en la Región de Murcia.
López-Morell ha manifestado que “los datos nos parecen muy negativos porque nuestra región es una de las dos Comunidades Autónomas en las que ha crecido el paro, en concreto en 7.800 desempleados más durante la época estival, lo que demuestra que el turismo no ha servido de estímulo, tal y como debía de haber sucedido en base a nuestra estructura económica”.
En este último periodo, en la Región de Murcia se estima que hay un total de 703.900 personas activas, de las cuales 564.900 están ocupadas y 139.000 están en situación deparo, alcanzando la tasa de actividad el 59,35%.
En los últimos 12 meses en la Región de Murcia, la tasa de paro ha descendido 3,74 puntos porcentuales, mientras que en España se ha reducido en 2,27 puntos porcentuales. Teniendo en cuenta que hasta la fecha la Región de Murcia era líder en desempleo, los datos no son tan optimista como parecen. La tasa de paro se mantiene en torno al 20%, con un 18% de paro en hombres y un 21% en mujeres.
En la Región de Murcia, el colectivo de hombres tiene una tasa de temporalidad del 33,7% y entre las mujeres este indicador alcanza el 35,4%, ambas se sitúan casi diez puntos por delante de la media nacional, una de las más altas de España.
Desde la Unión General de Trabajadores, a través de Encarna del Baño, advierten que los datos de la EPA sitúan a la Región de Murcia como la única Comunidad Autónoma que destruye empleo en este tercer trimestre del año, una destrucción de empleo que se concentra en exclusiva en el empleo asalariado del sector privado, que pierde 8.200 puestos de trabajo. En cambio aumentan los trabajadores por cuenta propia (2.200) y, aunque muy levemente, también los asalariados en el sector público (400).
Todo ello, en opinión de UGT, pone de manifiesto la incapacidad del mercado regional de trabajo para crear empleo estable y de calidad. “Las cifras evidencian, trimestre tras trimestre, que la recuperación económica vuelve a sostenerse sobre los mismos inconsistentes pilares que en la etapa anterior: sectores de escaso valor añadido y una demanda de mano de obra poco cualificada y mal remunerada”.
Ni siquiera las cifras de verano, que suelen beneficiar a la Región y equilibrar la balanza respecto al resto del año, han sido suficientes para mejorar la situación. “Los malos resultados confirman la tendencia de los meses de agosto y septiembre, que según los datos del paro registrado también son negativos para el empleo”, manifiesta el diputado socialista Antonio Guillamón.
El diputado de Podemos, Andrés Pedreño, llegaba a la siguiente conclusión: “tenemos la amarga primera posición, de ser la comunidad que lidera el aumento de parados, lo que nos convierte en el territorio del país que menos posibilidades de actividad laboral ofrece, y donde los síntomas de recuperación en el ámbito del trabajo brillan por su ausencia”.