El Gobierno de Navarra pedirá a Interior que agentes de Tráfico de la Guardia Civil puedan integrarse en la Policía Foral

Con la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno gracias entre otras cosas al apoyo de los diputados del PNV, al nuevo ejecutivo del que todavía queda por concretar su estructura le tocará ir cumpliendo en los próximos meses los puntos del acuerdo firmado entre el PSOE y el PNV para que los nacionalistas vascos votaran a favor de la investidura de Sánchez. Entre los puntos de ese acuerdo se encuentra la transferencia de Tráfico a Navarra “con el mismo contenido en extensión que las realizadas en su momento a la CAV” en un plazo de seis meses.

El traspaso de las competencias de Tráfico se tendrá que formalizar en una Junta de Transferencias para la que todavía no hay fecha, pero el Gobierno de Navarra ya está estudiando cómo asumir las competencias. Fuentes del Ejecutivo foral confirman a este periódico que en esa reunión se le va a pedir a Interior que parte de los 175 agentes de Tráfico de la Guardia Civil que operan en Navarra pasen a formar parte de la Policía Foral acogiéndose a la disposición adicional novena de la Ley de Policías de Navarra de 2018, que establece que, en el caso de que se produzca esta transferencia, agentes de la Guardia Civil podrán seguir desarrollando sus funciones merced a una 'pasarela' legal que les permitiría pasar de ser funcionarios estatales a funcionarios autonómicos.

Esta disposición adicional novena no estaba incluida en el proyecto de ley que presentaron Geroa Bai y EH Bildu, pero fue incluida a través de una enmienda a propuesta de UPN (principal partido de la marca Navarra Suma) y que contó con los apoyos del PP (ahora también dentro de Navarra Suma) y del PSN. UPN dio por supuesto el traspaso de las competencias de Tráfico y consiguió que se añadiera esta disposición para que la Guardia Civil no perdiera capital humano en Navarra y, posteriormente, terminó votando a favor de la ley.

Sergio Sayas, diputado de UPN en el Congreso que el domingo criticó en el pleno de investidura que se quería “expulsar” a la Guardia Civil de Navarra, celebró en noviembre de 2018 en el Parlamento foral cuando se aprobó la Ley de Policías el haber “conseguido una cosa fundamental para Unión del Pueblo Navarro, que era la pasarela para la Guardia Civil”, dando por hecho que la transferencia que ahora tanto critican se iba a producir.

En la actualidad Tráfico es una competencia compartida entre la Policía Foral y la Guardia Civil de la que se encargan unos 400 agentes, más o menos 200 de cada uno de los dos cuerpos policiales. Conscientes de que con los 1.078 efectivos que tiene en total el cuerpo policial foral no se podría reemplazar con garantías a los agentes de Tráfico del instituto armado, el Gobierno de Navarra se va a acoger a esta disposición adicional de la normativa policial navarra para que todos o algunos de esos agentes cambien el uniforme verde por el rojo. Todo ello tendrá que ser negociado con el Estado en esa Junta de Transferencias, pero desde el Gobierno de Navarra confían en que no haya “ningún problema”.