El Reyno Arena no aportará beneficios a la Comunidad Foral

El Departamento de Políticas Sociales, del que depende el Reyno de Navarra Arena, ha consignado en su propuesta de presupuesto para el año que viene 390.000 euros en concepto de funcionamiento del pabellón pero no contempla ingresar ni un euro por la gestión del espacio deportivo. ¿Cómo se va a utilizar este dinero? En principio, el consejero de Políticas Sociales ha avanzado que el polideportivo se abrirá para eventos puntuales y no se mantendrá abierto todo el año, y que el modelo de gestión será público – privada pero sin detallar las condiciones ni las intenciones del departamento, que parece que se encaminan a pagar a una empresa privada para que gestione la actividad del Reyno y no reporte beneficios para la Comunidad Foral.

Del mismo modo que en el anteproyecto de presupuestos aparece como gasto esa partida de 390.000 euros en concepto de funcionamiento, aparecen dos partidas simbólicas de equipamiento y una genérica a nombre de la infraestructura que, aunque figuran con 10 euros, serían ampliables en caso de que fuera necesario realizar nuevas inversiones en el edificio. Sin embargo, en los ingresos previstos por el Gobierno no aparece ni un euro por la gestión del equipamiento.

Según el anteproyecto de presupuestos, parece que la previsión del ejecutivo es que la infraestructura sea gestionada por una empresa privada y que no reporte beneficios, sino todo lo contrario. Esos 390.000 euros reservados para la puesta en marcha del Reyno Arena y la falta de ingresos por el polideportivo apuntan a que el departamento de políticas sociales plantea realizar una concesión para la explotación del espacio por la que el Gobierno pagaría esos 390.000 euros a una empresa privada para que realizara los eventos oportunos.

El temor de Izquierda - Ezkerra, el grupo que motivó comparecencia del consejero, es que el polideportivo siga suponiendo costes para la Administración. Plantean dos escenarios posibles; que UPN quiera organizar un evento de cara a las elecciones para simular que el pabellón funciona, o que sufraguen los costes de mantenimiento para que un equipo deportivo se instale en el edificio y, de nuevo, parezca que tiene uso. En ambos casos piden al ejecutivo que mantengan el Reyno Arena cerrado, con coste cero, en lugar de abrirlo y que siga suponiendo gastos importantes para las arcas forales. Un debate que queda pendiente en el Parlamento navarro, que está esperando un informe de la Cámara de Comptos sobre la inversión realizada y el mejor futuro posible para la infraestructura.

Por parte del ejecutivo falta por concretar la propuesta que hacen ya que, pese a que cuantifican lo que el año que viene prevén gastar para poner en marcha el Reyno Arena, todavía no han detallado qué pretenden hacer con el pabellón, más allá de que abrirá de forma puntual y no continuada. Una infraestructura que sigue acumulando retrasos, esta vez, en aclarar para qué va a servir y cómo se va a gestionar. A pesar de que se anunció que en septiembre se conocería el futuro del edificio ya que contarían con un estudio sobre cuál era el mejor futuro para el multiusos, un mes después, el Gobierno sigue sin dar explicaciones.