El exfiscal general del TPI pide que las tribus libias lideren las negociaciones de paz

El exfiscal general del Tribunal Penal Internacional (TPI) el argentino Luis Moreno Ocampo pidió hoy que las tribus libias lideren las negociaciones para solucionar el conflicto en ese país y advirtió de que los libios “deben aprender a entenderse solos”.

En una entrevista con Efe en El Cairo, donde Moreno Ocampo está participando en un encuentro de jeques tribales y miembros del Parlamento libio de Tobruk -reconocido internacionalmente-, afirmó que utilizará su experiencia en el TPI para resolver la crisis que vive Libia desde 2011.

Su papel en la solución del conflicto libio será el asesoramiento de los líderes tribales para ayudarles a “recopilar información para detectar a los terroristas y para ayudarles a hacer justicia”.

La gente en Libia “entiende perfectamente” que hay un problema con el terrorismo “diferente” al que hay entre los civiles de otras ciudades y tribus, que es un problema que “surge del rencor por los crímenes que se cometieron” en 2011, tras la guerra que derrocó al entonces dictador Muamar al Gadafi.

“Si ahora no apoyamos el diálogo y la justicia, va a haber venganza, 'revenganza' y 'contravenganza' durante cien años”, alertó.

En Libia, el poder está dividido entre los Gobiernos de Trípoli y de Tobruk, a quienes apoyan distintos grupos islamistas, señores de la guerra, líderes tribales, así como contrabandistas de petróleo, armas, personas y drogas.

Al mismo tiempo se fortalecen grupos yihadistas afines al grupo Estado Islámico (EI) y Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), la organización terrorista más fuerte en el norte de África.

Además, Moreno Ocampo explicó que hay que “actuar ahora, en medio de este caos”, y pidió ayudar a los líderes tribales “a poner orden”, aunque reconoció que actualmente no está logrando llegar a “todas las partes del conflicto”, en referencia a las milicias de Misrata (aliados al Gobierno de Trípoli).

Por otro lado, el mediador de la ONU, Bernardino León, propuso recientemente la formación de un Gobierno de unidad nacional, un Consejo Presidencial, un Parlamento y un Consejo de Estado, cuyo control y formación se repartiría entre las dos facciones rivales.

No obstante, algunos líderes tribales consideran que ese Gobierno incluye miembros terroristas.

“Naciones Unidas no tiene buena información o no se preocupa demasiado en conseguirla, y a veces pasa que los terroristas utilizan las negociaciones para tomar poder”, lamentó el exfiscal general.

Los libios, agregó, “necesitan más movimiento nacional” porque deben “aprender a arreglar sus problemas entre ellos”.

Moreno Campo precisó que hay explicar bien a Bernardino León “lo que piensan los jefes tribales” porque ellos necesitan una respuesta de la ONU para enfrentarse a Al Qaeda y al extremismo.

Al mismo tiempo, señaló que “hay veces que Naciones Unidas no ayuda a resolver los conflictos, sino que los complica”.

Asimismo, exigió dar poder a los ciudadanos locales y “enseñarle a no matarse entre ellos”, dijo.

Además, aseguró que el dictador Muamar Al Gadafi (1969-2011) “dejó a Libia sin instituciones” por lo que hay que volver a reconstruirlas, aunque reconoció que el problema está en que “todos los funcionarios públicos pertenecen a las autoridades” del exdictador, lo que impide una verdadera renovación gubernamental.