El diputado y exgobernador bonaerense Felipe Solá será el canciller argentino

Felipe Solá, exgobernador de la provincia de Buenos Aires (2002-2007) y actual diputado, será el ministro de Relaciones Exteriores del Gobierno del peronista Alberto Fernández, que asumirá oficialmente el próximo martes, informaron este jueves fuentes de su coalición política.

La confirmación de Solá llega tras varias semanas encabezando las apuestas de nombres para ocupar el máximo cargo diplomático del país, al haber acompañado a Fernández en algunos de sus viajes al exterior.

En un comunicado, el peronista Frente de Todos hizo oficial el nombramiento después de que el presidente electo -cuya vicepresidenta será la exmandataria Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015)- recibiera en sus oficinas a una delegación de diputados de Brasil encabezada por el presidente de la Cámara de Diputados de ese país, Rodrigo Maia.

Fernández estuvo acompañado por Solá, a quien presentó como futuro canciller, y el exvicepresidente del país Daniel Scioli (2003-2007), quien será embajador en Brasil, entre otros colaboradores.

UN INGENIERO AGRÓNOMO

Ingeniero agrónomo e integrante del Partido Justicialista -fundado por el expresidente Juan Domingo Perón a mediados del siglo XX- la carrera política de Solá comenzó en 1987, cuando asumió como ministro de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires.

Ya en 1989 pasó a ocupar la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, en el primer gobierno de Carlos Menem (1989-1999), hasta 1991, cuando fue elegido diputado, cargo que ocupó por dos años, momento en que volvió a la misma Secretaría.

En 1999 fue elegido vicegobernador de la provincia de Buenos Aires -la más poblada e influyente del país-, pero tres años después, al ser el entonces gobernador, Carlos Ruckauf, convocado para ser canciller, sustituyó a este en el cargo, que logró retener en las elecciones de 2003.

Ya en 2007 fue elegido otra vez diputado, pero las “fuertes divergencias” ante al rumbo que estaba tomando la gestión de Cristina Fernández le llevó en noviembre de 2008 a separarse del bloque oficialista en la Cámara Baja y formar una bancada propia con otros peronistas.

En 2009 renunció a su escaño para postularse como candidato a diputado -y salir posteriormente elegido- en alianza con Unión-PRO junto a Francisco de Narváez y el actual presidente saliente, el conservador Mauricio Macri.

Precandidato presidencial en 2011 y ya desvinculado de Macri, hasta ahora seguía ocupando un escaño como diputado y su mandato concluía en 2021.

PRESENTADO ANTE DIPUTADOS BRASILEÑOS

En el encuentro con los diputados de Brasil, Fernández les pidió que transmitan al presidente de ese país, Jair Bolsonaro, su “respeto y valoración para trabajar juntos”.

“Si nos respetamos, convivir es más fácil. (...) Mi primer gesto con Brasil es enviar como embajador a alguien muy valorado por mí”, dijo Fernández sobre Scioli.

Estas declaraciones se dan después de que la relación del nuevo presidente argentino -cuya vicepresidenta es la exmandataria Cristina Fernández (2007-2015)- con el jefe de Estado de Brasil, país que es el principal socio comercial de Argentina, no empezara con buen pie.

Bolsonaro, que apoyó la reelección del presidente saliente, Mauricio Macri, en las elecciones de octubre pasado, dijo tras la victoria de Fernández que no lo felicitaría y que con el cambio de color en el país vecino se preparaba para “lo peor”, al considerar que seguirá el mismo camino populista que los Gobiernos de su principal enemigo político, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011).

“Tenemos un destino en común, tenemos que cuidar que ninguna coyuntura altere nuestra relación: Brasil es un hermano con otro idioma”, afirmó hoy Fernández, convencido de que “la integración regional es la mejor herramienta para enfrentar la globalización, como en el reciente tema de los aranceles al acero”, en referencia a la decisión del Gobierno de Estados Unidos de restablecer aranceles a las importaciones de acero y aluminio de Argentina y Brasil.

Según añade el texto difundido, Maia remarcó que Bolsonaro estaba informado de la visita de la delegación de diputados a Fernández y transmitió que espera tener una “buena relación” entre ambos gobiernos.

“Estamos felices de trabajar con Argentina y de acercar a los gobiernos para tener más fuerza al enfrentar los desafíos de la economía mundial”, indicó Maia.