El Gobierno va cruzando líneas que tiempo atrás parecerían imposibles, pero con el convencimiento de que la gravedad de la situación, con la condena al fiscal general del Estado como máximo exponente, obligan a echar el resto contra lo que consideran que es una campaña orquestada por los sectores más ultras de la derecha. No obstante, esto no ocurre solo en España, sino que es un fenómeno en toda Europa: los bulos y la desinformación que buscan minar la democracia.
De ahí que el Gobierno se haya lanzado a señalar la contradicción del Tribunal Supremo al condenar a Álvaro García Ortiz por la filtración de información sobre el caso del fraude fiscal de la pareja de Isabel Díaz Ayuso, Alberto González Amador, cuando su jefe de gabinete, Miguel Ángel Rodríguez (MAR), reconoció en el juicio haber mentido. Rodríguez fue el origen del bulo que obligó a la Fiscalía a aclarar la verdad. La sentencia al fiscal general, a la espera de conocer la argumentación, condena el desmentido de la desinformación mientras la mentira campa a sus anchas.
Esa es una de las cosas contra las que se revuelve el Gobierno en plena digestión del fallo del Supremo. “Pudimos escuchar claramente cómo grandes profesionales del periodismo estaban allí en calidad de testigos y obligados a decir la verdad y escuchamos que en ningún caso ese correo había llegado por parte del fiscal general del Estado”, expresó la portavoz, Pilar Alegría, en una entrevista en TVE: “Es llamativo que tuviéramos escuchar a Miguel Ángel Rodríguez reconocer alegremente que su información no se basaba en ninguna fuente y que había mentido”. “Y queda impune”, lamentó.
“Es el que mejor lo explica todo porque es el autor de todo y, en efecto, celebra una victoria política. Pero lo lamentable es que celebra la victoria de la impunidad”, dijo el ministro de Transformación Digital, Óscar López, en Espejo Público (Antena 3), donde apuntó no solo a la impunidad de Rodríguez sino de la propia Ayuso.
“Cuando salió la compra de mascarillas por parte del hermano de la señora Ayuso y el señor Casado tuvo la valentía de denunciar eso, salió el señor Casado”, dijo en referencia a la guerra que acabó con el líder del PP. “Cuando han salido las supuestas irregularidades y supuestos delitos del novio de la señora Ayuso, quien sale es el fiscal general del Estado. Y al final, hay un mensaje de impunidad de que pueden hacer lo que sea, que pagará quien sea, menos quien lo hace”, agregó López. “Los abogados de la pareja de Ayuso van a utilizar que hay un fallo, no sentencia, un fallo injusto que condena a alguien sin pruebas para intentar liberar a alguien que sí que ha cometido un delito con pruebas”, anticipó.
Lo que reconocen en Moncloa es que han decidido cruzar líneas que hasta ahora no habían traspasado públicamente. “Lo que hemos hecho es poner negro sobre blanco lo que hablábamos solo en privado. Este señor [MAR] trabaja para González Amador y ha sido él quien ha convertido esto en una cuestión política tirándose meses hablando del pa'lante”, argumentan fuentes gubernamentales.
“Atienden la llamada de Aznar”
“Lo que es verdaderamente para aplaudir es cómo la estrategia de Miguel Ángel Rodríguez y la señora Ayuso les ha funcionado, es verdaderamente increíble. Y no hubiera funcionado si no fuera porque algunos quieren que funcione, es evidente”, ha afirmado López en referencia a los jueces del Supremo. Y es que en ese tema los socialistas también se han quitado los complejos de no poder criticar las sentencias judiciales.
Es el también líder del PSOE en Madrid el que ha asumido ese rol como portavoz de la posición más dura de los socialistas y este lunes ha cargado contra los jueces que “atienden a esa llamada de [José María] Aznar, que creen de verdad que el Estado está en riesgo que se cae el país y que tienen que salvar la patria y que niegan la legitimidad de este Gobierno”.
Lo que se desprende de las palabras de López es que la condena del fiscal general ha sido fruto de una maniobra orquestada que supone el culmen de una estrategia que en Moncloa consideran que es generalizada de la “máquina del fango”. “Alguien publica una mentira, el PP lo amplifica, el resto de medios se hacen eco por lo que dice el PP”, explican fuentes gubernamentales, que ven en la publicación de una supuesta reunión de Pedro Sánchez con Arnaldo Otegi para la moción de censura de 2018 un ejemplo perfecto que les ha “venido bien” para ilustrar su denuncia del “ciclo del bulo”.
La “mentira” de la reunión de Sánchez y Otegi
Este fin de semana El Español publicó una supuesta exclusiva sobre ese encuentro, al que habrían asistido también Santos Cerdán y Koldo García como conductor. “Con toda serenidad y tranquilidad, esa reunión es falsa, no se produjo”, contestó López, que pidió a los periodistas que ayudaran a que “la verdad impere”. “Los bulos se llevan por delante la democracia”, alertó.
“Eso es mentira”, respondió Pedro Sánchez a los periodistas en Luanda (Angola), donde le preguntaron por ese asunto antes de participar en una cumbre de la UE y la Unión Africana. Para entonces, El Español había amenazado con una nueva primicia sobre el asunto que terminó siendo el testimonio de Koldo García, única fuente de la información, que confirmaba lo que inicialmente había publicado ese periódico.
También el secretario general de EH Bildu dijo que es “rotundamente falso que existiera esa reunión”. “Nunca he hablado con Pedro Sánchez”, aseguró en ETB, donde se comprometió a presentar su dimisión si alguien probaba ese encuentro. “Aquí lo que se trata es de mentir descaradamente”. “En el 11M hubo gente que mintió para ganar unas elecciones, y hoy los mismos vuelven a mentir para intentar tumbar el Gobierno de Sánchez. Y algunos entonces dijimos la verdad y hoy también la decimos. Es una invención del bloque reaccionario de PP y Vox”, apuntó.
“Koldo García es un colaborador de la Guardia Civil y seguramente estará pactando cómo salvar su piel ante la judicatura. Es rotundamente falso. Yo jamás he estado reunido con Pedro Sánchez. La verdad se abrirá paso y se sabrán las cosas como realmente sucedieron. Koldo García miente y El Español miente”, zanjó.
La intención de Moncloa es rebelarse contra los bulos que crecen exponencialmente a través de medios de comunicación y redes sociales y que en los últimos años se cuentan por decenas: desde la falsa transexualidad de la mujer del presidente hasta las cuentas en Panamá de Óscar López. “Es lo que está viviendo este país y lo decimos”, señalan fuentes gubernamentales, que ven con indefensión cómo la mentira de Miguel Ángel Rodríguez pasó sin pena ni gloria por un juicio en el que “se ha dictado una sentencia injusta”.