Algarada en el segundo pleno de la legislatura en Chamberí. Al igual que en el primero, las protestas eclipsaron las intervenciones y anuncios de los políticos pero, a diferencia que en la sesión en la que un grupo de feministas acabaron expulsadas por bloquear el paso al concejal Ortega Smith, esta vez los que acabaron marchándose del salón principal de la Junta de distrito fueron los vocales vecinos de la oposición, después de ser insultados por parte del público en repetidas ocasiones.
Un grupo de diez personas que previamente habían jaleado una intervención de Vox profirieron varios insultos a los vocales vecinos del PSOE y de Más Madrid, ante la impasibilidad del concejal presidente del distrito, Javier Ramírez (PP), que no llegó a llamarles al orden aunque sí que acusó al anterior equipo de Gobierno de «invitar a terroristas». La situación se fue calentando hasta que, durante una pregunta de Más Madrid y cuando se había cumplido una hora de sesión, varias personas del público llamaron «asesino» al vocal vecino de este grupo político que estaba en el uso de la palabra.
Escribe Diego Casado.