La pelea de bar convertida en “brutal agresión” por llevar una bandera de España que ha desatado una campaña de la extrema derecha

Denuncias cruzadas entre los implicados con versiones contradictorias, un enfoque sesgado en las primeras informaciones y una campaña de acoso de la extrema derecha en redes sociales. Así es cómo una pelea de bar denunciada por un agente de la Guardia Civil fuera de servicio y el propietario de una taberna almeriense se ha convertido en una “brutal agresión” contra un hombre “por llevar un polo con la bandera de España”, una versión que nadie corrobora.

La historia de la reyerta en la Taberna Postigo arrancó el pasado viernes al hilo de una serie de tuits en las que se denunciaba la paliza que había recibido un día antes un guardia civil fuera de servicio por vestir un polo con la enseña nacional. Estos tuits, en los que ya se llamaba al boicot al negocio, sirvieron para una primera publicación en OkDiario en la que se hablaba de una “brutal agresión” a un agente por llevar la mencionada prenda “y ser agente de la Benemérita”.

Según la información publicada, basada en la denuncia presentada por el supuesto agredido, sobre las diez de la noche del jueves una mujer increpó al agente por invadir “su espacio sideral con pintas de fascista”. Tras ser expulsado del local por los empleados, el hombre dice haber sido agredido por varios de ellos que le golpearon durante “unos cuarenta segundos” mientras permanecía tirado en el suelo.

Esa versión es en la que se han basado el presidente de Vox, Santiago Abascal (que tuvo que borrar su tuit horas más tarde), el presidente de la organización de extrema derecha Actúa Baleares, Jorge Campos Asensi, y cientos de tuiteros para llamar al boicot contra el Postigo y para amenazar a sus propietarios. Algunos usuarios reconocen que si ellos fueran el guardia civil, habrían tenido “serios problemas de autocontrol para no utilizar el arma reglamentaria”.

Sin embargo, la versión de los testigos recogida por el diario Ideal de Almería apunta en otra dirección. Según este periódico, el propietario expulsó al individuo porque intentó cruzar la barra del bar “en un evidente estado de embriaguez”. “Ambos se vieron implicados en una pelea que acabó con el dueño del bar herido en la cara y la otra persona, en la pierna”.

Tras ser expulsado de la Taberna Postigo, según el relato de los testigos recogido por el diario almeriense, el hombre permaneció “durante casi media hora' profiriendo insultos al personal del establecimiento, llamándolos 'podemitas' y asegurando que le habían echado por llevar la bandera de España” en un polo, prenda que llevaba cubierta antes de la pelea. Esa es una de las escenas de la reyerta que puede verse en una serie de vídeos difundidos en Twitter y que algunos testigos presenciales han confirmado.

“No parece que fuera una agresión por identificarse como español”, aseguran a eldiario.es desde uno de los sindicatos mayoritario de la Guardia Civil. Según el sindicato, nada parece apuntar hacia un delito de odio y la versión que parece más probable es la de la reyerta con una agente fuera de servicio que había bebido más de la cuenta: “La percepción que tenemos es que no fue por un delito de odio. Parece que se trata más de una reyerta con una persona que estaba en estado de embriaguez”.

La Policía Nacional ha confirmado a eldiario.es que existen denuncias cruzadas entre ambas partes, aunque han descartado hacer más comentarios sobre el caso hasta que se lleve a cabo la investigación. Desde la Guardia Civil remiten a las explicaciones que pueda dar la Policía Nacional y aseguran que el agente no está destinado en Almería.

La campaña de acoso contra el Postigo ha llevado a TripAdvisor a bloquear los comentarios en la página que el establecimiento tiene en el portal. “Debido a un incidente reciente que ha captado la atención de los medios de comunicación y ha provocado que se reciba un gran volumen de opiniones que no incluyen una experiencia real en el establecimiento, hemos suspendido temporalmente el envío de nuevas opiniones a este perfil”, puede leerse en la página.

Además de las amenazas que están recibiendo por Twitter, en la página de Facebook del Postigo han aparecido comentarios en los que se insulta a los propietarios por la supuesta agresión al guardia civil el pasado jueves. “Todos y cada uno de los 'valientes' que agredisteis a este salvador de ESPAÑA (sic) pagaréis caro”, puede leerse en uno de ellos.

La valoración de la taberna también se ha visto afectada por los comentarios negativos en Facebook. Desde el pasado viernes, ha pasado de una valoración que rozaba las cinco estrellas con apenas 21 valoraciones a una puntuación de 1,6 con más de 150 valoraciones. Además, el teléfono de contacto que aparece en la página del restaurante no da señal.

A pesar de las críticas y de los insultos en todas las redes sociales, algunos usuarios han publicado mensajes de apoyo al establecimiento. “En esa taberna a los legionarios siempre nos han tratado muy bien. Nunca han tenido ninguna falta ni ningún mal gesto ni con nosotros ni con nada que tenga que ver con el país que defendemos”, asegura alguien que dice ser legionario en uno de ellos.

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