La Policía Local de Sevilla usará pistolas inteligentes que sólo pueden disparar los agentes

Suena un poco a ciencia ficción, pero en cuanto se conoce el mecanismo no parece ni complicado. La Policía Local de Sevilla va a portar pistolas a las que se instalará un dispositivo para que sólo puedan dispararlas los agentes, una iniciativa que desde el gobierno local se proclama como pionera en el ámbito estatal y que podría ser una realidad en un año como tarde. 

Nada de huella digital o perfil genético, el sistema funciona de una manera bastante simple al menos de cara al usuario, porque lógicamente tiene todo un desarrollo tecnológico detrás: basta con que el agente se ponga una pulsera en la muñeca o el tobillo. La cuestión es que este elemento esté en contacto con la piel del policía, ya que se aprovecha su conductividad para conectar arma y persona.

Pistola inteligente y personalizada

¿El resultado? “Una pistola segura, inteligente, personalizada y que sólo puede usar la persona o las personas autorizadas”, explicaba Félix Baro, director general de Rade Tecnologías (Radetec), la empresa de ingeniería que ha desarrollado el prototipo y que tiene sedes en Tudela, Zaragoza y Miami. El sistema electrónico permite al agente hacer uso del arma con guantes y con cualquiera de las dos manos, además de determinar si pueden utilizarla también los compañeros y disponer de toda la información sobre su uso.

Los responsables de esta firma de I+D+i subrayan que el mecanismo no se puede anular con inhibidores, que es insensible a turbulencias o distorsiones ambientales y que la batería se puede recargar por USB o incluso sin cables, por inducción. La cuestión que ahora debe decidir el Ayuntamiento es qué ocurre con la pistola cuando la batería se descarga, ya que existen dos posibilidades: o se inutiliza por completo o se utiliza como un arma estándar sin limitación alguna, que por cierto es lo que recomienda la empresa, especializada en electrónica de armamento enfocado en la seguridad.

También en las galerías de tiro

El concejal de Gobernación, Juan Carlos Cabrera, incidía en que esta pistola inteligente aporta más seguridad al ciudadano y al policía, ya que tiene la tranquilidad de que si se la arrebatan en un forcejeo o la pierde no podrá utilizarse. Ahora hay que ver en qué armas de las que utiliza actualmente la Policía Local se puede adaptar este mecanismo, que a su vez determinará el modelo de las que se adquieran a partir de ahora.

El tiempo para empezar a utilizarla puede oscilar entre los seis meses y el año, y básicamente lo determinará el periodo de formación que se llevará a cabo y que los agentes se encuentren habituados y cómodos con este sistema. Por cierto, el Ayuntamiento ya está embarcado en otro proyecto similar con la misma empresa para dotar de más seguridad las salas de tiro de la Policía Local, de manera que si la pistola no apunta a la diana no podrá dispararse. En definitiva, que las armas futuristas con las que se fantasea en la ciencia ficción empiezan a ser una realidad y, al final, hasta parecen menos complicadas que en las películas.