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Los jueces rechazan el recurso de los ecologistas para anular el permiso de la mina de uranio de Salamanca

Zona de explotación en Retortillo (Salamanca) con la balsa recién excavada /Salamanca Antinuclear

Raúl Rejón

La Audiencia Nacional ha rechazado dos años después el recurso de los ecologistas para anular el permiso del proyecto de mina de uranio que la empresa australiana Berkeley Minera planea en el oeste de Salamanca.

Ecologistas en Acción y la formación Foro de Izquierdas-Los Verdes habían pedido a los magistrados que anularan la autorización previa de emplazamiento concedida por el Ministerio de Industria en 2015. También solicitaban que la Declaración de Impacto Ambiental fuera eliminada. Ninguna de sus peticiones ha sido atendida por la Audiencia Nacional en una sentencia de 9 de septiembre ahora publicada.

La demanda intentaba revocar el permiso para colocar una instalación radioactiva en una un área de la Red Natura 2000 de protección ambiental. La zona tiene declarado un alto valor ecológico y es parte protagonista, por ejemplo, de sendos programas LIFE de la Unión Europea: uno para recuperar humedales y otro para detener la regresión de la fauna fluvial ibérica.Ambos suman más de cinco millones de dinero público. Un vídeo aéreo de Salamanca Antinuclear mostró cómo estaba quedando la zona por los trabajos previos de la empresa.

Sin embargo, la sentencia subraya que el recurso se basa en “juicios de valor'' sin aportar, dice, elementos técnicos que justifiquen que el lugar elegido no es adecuado frente a los ''numerosos informes técnicos'' que componen el expediente.

La decisión es recurrible y la idea de los ecologistas es llevar el caso al Supremo, ha explicado uno de los abogados a eldiario.es.

El proyecto de mina tiene pendiente todavía un trámite crucial en el Consejo de Seguridad Nuclear: un informe sobre la infraestructura para la fabricación de concentrados de uranio. Esta planta es indispensable para el proyecto minero y el análisis podría demorarse dos años, según admitió el Gobierno en 2017. Aún no ha visto la luz.

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