Los relojes de sol en la península son incontables pero el más antiguo está en este pueblo de Sevilla

La aparición de los relojes solares para medir el tiempo se remonta a la Antigüedad, ya que el más antiguo, según coinciden muchos expertos, fue hallado en Egipto hace unos 1.500 años antes de nuestra era. 

La mayor difusión de estos curiosos pero precisos relojes se produjo durante la época romana, civilización que los extendió por toda Europa y también, lógicamente, a lo largo y ancho de nuestra geografía. 

De hecho, con muchas las ciudades españolas con varios ejemplos de cuidados relojes de sol en algunas de sus más memorables fachadas, pero entre ellos destaca el de Écija, localidad sevillana que según muchos expertos alberga la distinción de tener entre sus calles el reloj de sol más antiguo de todos.

Símbolo de la Hispania romana

La ciudad andaluza fue un enclave de gran importancia en la Hispania romana, de ahí que el reloj se haya convertido en todo un recordatorio tangible de su importancia histórica.

El reloj se encuentra concretamente en la iglesia de Santa Cruz. Posee una estructura de mampostería, con líneas horarias y una numeración en rojo en caracteres arábigos que comienza a las cinco de la mañana y termina a las cuatro de la tarde. Una última línea horaria, sin número, sugiere un ajuste para los cambios de estación.

El de Écija podría ser el más antiguo pero no es el único reloj de sol de gran valor en tierras andaluzas. Hay historiadores que han calificado de muy rico el patrimonio gnomónico existente en Andalucía, con numerosos ejemplos.

En el reloj ecijano, el gnomón, es decir, la pieza metálica que proyecta la sombra, tiene una forma peculiar: una «Y» acodada. Lógicamente y como el resto de relojes de sol, se trata de un sistema que durante todo este largo no ha precisado, a diferencia de los relojes mecánicos, de ningún ajuste o revisión tecnológica.

Actualmente, en toda España se continúan realizando bastantes relojes de sol, instrumentos científicos que nos pueden indicar la hora solar, declinación y altura del sol, fecha actual, etc., al margen del diseño o el valor histórico de la fachada en la que se refleje el sol cada día.