“Conillet” destripa lo más íntimo de una mujer con una gran Clara Segura

El Teatro de Salt ha acogido esta noche el estreno absoluto de “Conillet” (Conejito), una adaptación del actor y director Marc Martínez del texto de Marta Galán Sala “El conejito del tambor de Duracell” que parecía hecha a medida de la protagonista, Clara Segura, que ha estado arrolladora.

En esta obra estrenada en el marco del Festival Temporada Alta, Segura se ha transformado esta noche en una activista y el público asistente ha podido comprobar que el teatro puede servir tanto para disfrutar como para provocar y hacer pensar.

Y es que el texto de Marta Galán, ácido y tierno a la vez, sobre una mujer que rinde cuentas con su pasado y la interpretación poética y que ha hecho Segura del personaje han sido un auténtica invitación a la reflexión sobre la felicidad y el paso del tiempo.

Este monólogo hecho a medida de Segura ha permitido a los espectadores viajar a lo más íntimo de una mujer, que podría ser cualquiera, a través de su día a día.

Y lo ha hecho de un modo salvaje, pero con un peculiar sentido del humor que ha provocado carcajadas cómplices entre los asistentes, a los que se ha ganado tan solo empezar la actuación.

Una carta de la escuela en la que se advierte a la mujer que su hijo no progresa adecuadamente es el hecho que desencadena la acción y acelera las pulsaciones al único personaje de “Conillet”, que durante hora y media desgrana los miedos, sentimientos y pensamientos de una mujer de cuarenta años.

La obra es el autorretrato de una mujer al límite, que está cansada y que debe hacer equilibrios a diario para cuadrarlo todo: ser madre, amante, trabajadora, amiga, ser humano... La protagonista intenta cuadrar agendas y rascar minutos y horas de donde puede para llegar a todo, pero parece imposible lograrlo.

Y todo ello con el miedo rondando sus pensamientos. El miedo por sus hijos, el miedo ante la soledad, a las mentiras, a no ser querida, y sobre todo, a no ser entendida.

Conillet“ es un claro reflejo de la sociedad actual y expresa en voz alta lo que muchos piensan y no se atreven a expresar.

El personaje de Segura es una excepción: habla claro y de forma desacomplejada de su vida, que es como una vorágine que funciona a ritmo de un tambor de Duracell que no se detiene. Y la pregunta que queda en el aire es qué pasaría si un día se acabaran las pilas de todas la “conejitas” del mundo.

La obra, producida por Bitò Produccions y el Teatro Lliure, tiene otra función programada en el Teatro de Salt para este fin de semana: el sábado 7 de noviembre a las nueve de la noche. Después del estreno en Temporada Alta, “Conillet” hará temporada en el Teatro Lliure Montjuïc, en Barcelona, del 11 de noviembre al 6 de diciembre.