Feijóo y Millán Mon se esfuerzan en denigrar al resto de candidaturas gallegas a la Eurocámara
En tiempos del gobierno de coalición entre PSdeG y BNG en Galicia, se extendió en los medios políticos y periodísticos gallegos el apodo de “contraconsello” aplicado a la reunión semanal de la cúpula del PPdeG, que los de Alberto Núñez Feijóo celebraban los jueves, de manera casi simultánea al Consello da Xunta, para contraponer sus mensajes políticos a los del Gobierno. Salvando las distancias, algo semejante ocurría este martes en Compostela. El ahora titular de la Xunta se puso el traje político de presidente del partido para encabezar la sesión del Comité Ejecutivo que “activó el trabajo en la comunidad hasta las elecciones” europeas del 25 de mayo. Como antaño, el discurso de Feijóo marcó la doctrina política de los populares y, como durante las últimas semanas, este mensaje se centra en denigrar al resto de candidatos gallegos a las europeas.
Después de la presentación en sociedad de Miguel Arias Cañete como candidato del PP de la mano de Mariano Rajoy, Feijóo reprodujo el acto a pequeña escala con Francisco Millán Mon y Carmen Pardo, referentes del partido en Galicia en una lista en la que solo Millán concurre en puestos de salida. Desde la tribuna partidaria, Feijóo invita a la ciudadanía a “preguntarse quién podrá defender mejor sus intereses” en Bruselas y Estrasburgo para, acto seguido, “imaginar cómo se quedaría un parlamentario europeo” cuando “sepa” que José Blanco (PSdeG) formó parte del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, “cuando vea que los que se erigen en representantes de Galicia comparten escaño con Bildu” o cuando “escuhe a un antisistema gallego defender la supresión de todo tratado de funcionamiento de la Unión Europea”, agregó, en referencia al BNG y a AGE.
El PP, asegura, no busca una “jubilación dorada” para sus representantes en la Eurocámara, sino que envía allí a personas como Cañete, “que no va a necesitar ningún guía en su primer día en Europa que le enseñe quién es quien”. Lo mismo pasa en el caso de Millán Mon, asegura, que dada su experiencia diplomática y en el propio legislativo comunitario “no va a ir a aprender al Parlamento Europeo”. En la misma línea, Millán Mon –de quien la nota oficial del PP no difundió declaración alguna– ahondó en las tesis de su jefe de filas sentenciando que “hay que votar a los grandes partidos” y no a las organizaciones que “ni pintan ni pintarán nada”. Todo lo que no sean estas grandes formaciones es “ruido”, aseguró, en referencia velada a la actividad desarrollada por la nacionalista Ana Miranda.
La actividad de los eurodiputados gallegos
Los elogios al trabajo desarrollado por los representantes del PP gallego en la Eurocámara en la legislatura que ahora concluye (el propio Millán Mon y Carmen Fraga, que no repite en las listas por decisión propia) contrastan con sus datos de actividad parlamentaria, notablemente más discretos que los de quienes foron los otros dos eurodiputados gallegos, la mencionada Ana Miranda, del BNG, y el socialista Antolín Sánchez Presedo. Un vistazo a las bases de datos de la Eurocámara permite concluir que Miranda y Presedo fueron mucho más activos que sus homólogos del PP.
En cifras absolutas, Sánchez Presedo fue quien desplegó un mayor número de actividades parlamentarias, con 110 intervenciones en pleno, 1 informe, 3 opiniones, 20 propuestas de resolución, 146 preguntas parlamentarias y una declaración. En total, 288. Solo cuatro actividades menos fueron las desarrolladas por Ana Miranda, quien llegó a las 284 en el período en que dispuso de escaño propio, entre enero de 2012 y julio de 2013. En apenas año y medio realizó 113 intervenciones en pleno, 1 informe, 3 opiniones, 20 propuestas de resolución, 146 preguntas y 1 declaración. A esta actividad, que la convierte en la más activa en relación con su tiempo de mandato, habría que añadir, además, la desarrollada a través de Oriol Junqueras (ERC) e Iñaki Irazabalbeitia (Aralar), que canalizaron las iniciativas del Bloque durante el resto de la legislatura.
En un nivel sensiblemente más bajo están las actividades de Millán Mon y Carmen Fraga, con 150 y 80 actividades, respectivamente, a lo largo de estos cinco años. Quien es considerado hombre fuerte en Europa de su cuñado, Mariano Rajoy, protagonizó 77 intervenciones en pleno, un informe, 34 propuestas de resolución y 38 preguntas. Mientras, la hija de quien había sido presidente de la Xunta formuló 32 intervenciones, 19 informes, 3 opiniones, 6 propuestas de resolución y 20 preguntas parlamentarias.
