La Justicia bareiní confirma la disolución del principal partido opositor, el chií Al Wefaq

Una Corte de Apelación de Baréin confirmó hoy la orden de disolución del principal partido de la oposición, el chií Al Wefaq, y la confiscación de sus bienes, lo que fue condenado por organizaciones de derechos humanos.

Fuentes de Al Wefaq y judiciales informaron a Efe de que el tribunal rechazó los dos recursos presentados por los abogados del partido chií.

Al Wefaq todavía puede apelar esta decisión ante una corte superior, pero el equipo de defensa partido no ha decidido si va a adoptar esta medida, según las fuentes.

La orden de disolución fue decretado el pasado 14 de junio y confirmada el 17 de julio por un tribunal administrativo.

El Instituto de Baréin para los Derechos y la Democracia, basado en Reino Unido, y Americanos por la Democracia y los Derechos Humanos en Baréin, con sede en EEUU, criticaron en un comunicado conjunto la decisión.

“Los gobernantes creen que aplastar y silenciar las voces críticas es la solución para Baréin”, denunció la nota, que afirmó que la disolución de Al Wefaq es “el último clavo en el ataúd” de las supuestas reformas impulsadas por la monarquía bareiní.

El alto comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, también aseguró la semana pasada que el Gobierno bareiní ha tratado en la última década de “aplastar las voces de su gente, en lugar de servir” (al pueblo).

Los chiíes -que representan la mayoría de la población en Baréin, gobernado por una monarquía suní- han protagonizado protestas desde 2011 para pedir reformas políticas, las cuales han sido reprimidas por la fuerza.

Las autoridades han encarcelado a muchos opositores chiíes, entre ellos Ali Salman, el secretario general de Al Wefaq, y retirado la nacionalidad a decenas, lo que ha sido denunciado por organizaciones de derechos humanos locales e internacionales.

El pasado 20 de junio, las autoridades decidieron retirar la nacionalidad al líder espiritual de Al Wefaq y máxima autoridad religiosa chií del país, el ayatolá Isa Ahmed Qasim, por “fomentar un ambiente sectario y dañar la unidad del país”.

Al Wefaq, el principal partido bareiní desde su fundación en 2001, ganó el 60 % de los escaños del Parlamento en 2010 pese a la represión gubernamental de la mayoría chií.