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El PACMA denuncia: “Nos están robando nuestro derecho a presentarnos en igualdad a las elecciones de Catalunya”

PACMA denuncia las dificultades para poder presentarse el 21D en Catalunya

Carmen Moraga

Para el partido animalista PACMA cada convocatoria electoral es una vuelta a empezar desde cero. Según la Ley Orgánica del Régimen Electoral (LOREG), todas aquellas formaciones que no cuentan con representación parlamentaria, para poder concurrir a la cita con las urnas deben recoger previamente un número mínimo de firmas que avalen su candidatura. El PACMA ha anunciado que va a presentarse a las elecciones catalanas del 21D pero el documento oficial necesario para esa recogida de firmas ha tardado seis días en emitirse, un retraso que consideran “inaceptable”. “Es un boicot institucional en toda la regla”, afirma muy enfadada a eldiario.es Silvia Barquero, presidenta del partido.  

En Catalunya, en concreto, les piden un total de 5.500 firmas: 4.000 en la provincia de Barcelona y otras 1.500 entre las otras tres circunscripciones de Lleida, Girona y Tarragona. La campaña del PACMA para recoger esos avales podía haber empezado a partir del 28 de octubre, fecha en la que se publicó la convocatoria de las elecciones autonómicas en el BOE, dado que los activistas presentaron de inmediato la documentación necesaria ante la Junta Electoral Central para poder concurrir a esos comicios.

Sin embargo, han tenido que esperar hasta la reunión del Consejo de Ministros de este viernes para iniciar la recogida de firmas. ¿Por qué ese retraso? “En el Departamento de Presidència y Governació se escudaban en que como las elecciones no las ha convocado la Generalitat teníamos que esperar a que fuera el Gobierno central el que emitiera el documento. Unos y otros han estado echando balones fuera. Estos seis días de retraso suponen para un partido pequeño como el nuestro y prácticamente sin medios, una discriminación y una vulneración de nuestros derechos constituicionales”, lamenta Barquero.

Los activistas van a salir este fin de semana a la calle para recoger a todo correr las firmas que les exigen dado que el plazo para presentarlas les vence el próximo 17 de noviembre. “Pese a las mil trabas que nos ponen al final siempre logramos superar todos los obstáculos”, afirma con optimismo Barquero.

Pero aunque lo consigan siguen pensando en que se deben cambiar las reglas y suprimir este requisito previo de los avales que consideran “absurdo” e “injusto”. 

El PACMA lleva varias legislaturas intentando conseguir representación parlamentaria, no solo en Catalunya, sino en la mayoría de las comunidades autónomas españolas, además de en el Congreso y en el Senado. Han sido muchas las veces que han estado a punto de conseguirlo pero la Ley d'Hont y la circunscripción electoral provincial no les favorece.

El ejemplo más reciente que ponen es que en las últimas generales del 26J lograron 283.845 votos, es decir, 63.476 votos más que en las anteriores del 20D de 2015, en las que se quedaron en 220.369. El resultado fue casi idéntico al del PNV que cosechó 286.215 votos, apenas 2.370 más que el PACMA. La diferencia fue que los nacionalistas vascos consiguieron cinco escaños en el Congreso de los Diputados y ellos ninguno.

Sin desanimarse, ahora vuelven a la carga. En Catalunya centrarán su campaña en denunciar los estragos que causa la industria porcina, “un negocio floreciente, que crece con el aumento desmesurado de granjas y el sacrifico de más de 20 millones de cerdos al año”.

Esto, según los activista, genera graves problemas medioambientales y de salud para la población “del que nadie se hace eco”. “Catalunya se ha convertido en el vertedero de Europa. Se crían y se sacrifica allí los cerdos que luego se exportan al resto de Europa dejándonos la contaminación de los purines y de los acuíferos”, explica la presidenta del PACMA.

Otra de sus batallas está dirigida a la abolición de las fiestas con toros, como los correbous, o bous al carrer , que se siguen practicando en Valencia pero también en Catalunya. Allí una Iniciativa Legislativa Popular (ILP)  contra las corridas de toros fue aprobada en 2010 por el Parlament, lo que llevó a la prohibición de la Fiesta Nacional.

Sin embargo, una sentencia de octubre de 2016 del Tribunal Constitucional decidió que la ley catalana invadía las competencias del Estado y anuló la ILP impulsada por la ciudadanía. “No vamos a parar. Seguiremos luchando por los derechos de los animales”, replican.

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