Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
La izquierda presiona para que Pedro Sánchez no dimita
Illa ganaría con holgura y el independentismo perdería la mayoría absoluta
Opinión - Sánchez no puede más, nosotros tampoco. Por Pedro Almodóvar

The Guardian en español

Las fuerzas libias afirman que han expulsado al ISIS de su último bastión en el país

Tropas leales al parlamento de Libia a las afueras de la ciudad de Sirte.

Patrick Wintour / Chris Stephen (Túnez)

Las fuerzas libias afirman haber alcanzado el centro de la ciudad costera de Sirte, el bastión principal del Estado Islámico. Esto implica que el grupo yihadista puede haber perdido todo su control territorial del país.

La rapidez de esta aparente derrota del ISIS después de tres semanas de duros combates es llamativa, teniendo en cuenta que la inteligencia estadounidense indicaba hace solo dos meses que el grupo tenía 6.000 combatientes en la ciudad y que estaba empezando a suponer una amenaza para el vecino Túnez.

“Las fuerzas armadas han entrado en Sirte. Están ahora en el centro, donde continúan los enfrentamientos con el Daesh”, ha asegurado Mohamad Ghassri, portavoz de las fuerzas del Gobierno de Acuerdo Nacional (GNA), apoyado por la ONU. “La operación no durará mucho más. Creo que podremos anunciar la liberación de Sirte en dos o tres días”, anunció a la agencia AFP.

Aunque sigue siendo posible que la retirada del ISIS sea táctica, la mayoría de observadores creen que la ofensiva militar ha revelado que el ISIS es mucho más débil en Libia de lo que muchos pensaban.

El asalto de este jueves se organizó desde tres direcciones, con algunos ataques aéreos en la sala de conferencias de Ouagadougou, considerada el centro administrativo del ISIS en Libia. A última hora de la tarde, la armada libia aseguraba ya que habían tomado por completo la ciudad.

En las redes sociales han circulado varios vídeos que muestran a milicianos triunfantes haciendo signos de victoria y cantando “Allahu Akbar” o “Dios es grande” mientras conducían alrededor de Sirte. Fuerzas de Misrata, alienadas con el gobierno de Trípoli apoyado por la ONU, han difundido fotos que muestran que capturaron la zona en torno a una valla publicitaria que el ISIS usaba para mostrar los cuerpos, ataviados con monos naranjas, de sus víctimas mortales. La valla, en la intersección Zafaran de la ciudad, fue derribada cuando las milicias se adentraron hacia el centro de la ciudad.

Los avances territoriales, así como la supuesta muerte de algunos de los más altos líderes del ISIS, ha tenido un precio. El GNA ha pedido a Occidente ayuda médica urgente para sus combatientes heridos. Se ha asegurado que más de 100 libios han muerto y 490 han resultado heridos en su intento de expulsar al ISIS de Sirte.

El ataque parece haber sido organizado por dos brigadas de milicianos de Misrata, incluida Al-Bunyan Al-Marsoos, que puede conseguir apoyo aéreo. También ha habido fuerzas de la Petroleum Facilities Guard del oeste del país y algunas de Trípoli.

Un avance mucho más rápido de lo previsto

“Si las informaciones del mando conjunto son ciertas en parte, al menos están en el centro de la ciudad”, valora Mattia Toaldo, experto en Libia del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores. “Si son ciertas por completo, han alcanzado la central administrativa del ISIS. Si es el caso, estamos hablando de horas para el final, y no días. El ritmo de avance es mucho más rápido de lo que nadie predecía incluso hace dos días”.

Según Toaldo, esto sugiere que el ISIS no ha conseguido el apoyo de los habitantes de Sirte. “Puede ser que las estimaciones del número de combatientes del ISIS en Sirte se hayan exagerado mucho, que hablar de 6.000 militantes fuese erróneo y estuviesen más cerca de 700. Si las fuerzas de Misrata están avanzando a esta velocidad, habrán tenido ayuda de la inteligencia occidental sobre el terreno”.

El experto afirma que las fuerzas procedentes de tres lugares de Libia diferentes probablemente no tenían interés en permanecer en Sirte más tiempo del necesario y preferirían transferir la responsabilidad a los mayores y antiguas autoridades de la ciudad. “Esto no significa que el ISIS esté acabado en Libia si Sirte cae. El ejemplo del grupo en Bagdad muestra que si pierden territorio recurren al terrorismo, y puede ser que hayan enviado a sus fuerzas al desierto para reagruparse o prepararse para atacar más adelante a Trípoli”, advierte Toaldo.

Algunos observadores indican que hay una oportunidad de que los enfrentamientos más duros en Sirte puedan seguir adelante, con los combatientes del ISIS ahora posiblemente acorralados, de espaldas al mar. “Es difícil saber si el Estado Islámico en Libia se ha visto debilitado por la ofensiva porque no sabemos realmente qué nivel de fuerza tienen sus tropas”, señala el analista estadounidense Geoff Porter. “La batalla por Sirte puede ser larga y violenta”.

Es probable que la ausencia en la ofensiva del general Haftar, hombre fuerte del este de Libia y principal aliado de Egipto, sea significativa políticamente y suponga un desafío para sus intentos de presentarse hacia otros países como el interlocutor jefe en el Este. Ha perdido tropas en favor del Ministerio de Defensa del GNA, pero sigue teniendo poder y siendo la mayor fuerza que impide la formación de un ejército y un país unificados.

El ISIS perdió el año pasado su base de Derna, en el noreste de Libia, a manos de las fuerzas locales. En febrero, su base occidental de Sabratha fue destruida por las milicias y los ataques aéreos de Estados Unidos, lo que convirtió a Sirte en su último bastión.

Traducción de Jaime Sevilla Lorenzo

Etiquetas
stats