El rector de la UNIA pide a Wert que “repiense” el '3+2', que “puede crear un agujero en el bolsillo”

El rector de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA), Eugenio Domínguez, aboga por que el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, “retire y repiense” el decreto de reordenación de Grados aprobado en Consejo de Ministros, el llamado '3+2', que faculta a las universidades para implantar un modelo con tres años de Grado y dos de Máster, que “puede crear un agujero en el bolsillo” de los estudiantes.

A preguntas de los periodistas este martes antes del acto de inauguración del curso académico de la UNIA, celebrado en su sede de Baeza (Jaén), el rector ha expresado su planteamiento “muy crítico” con la nueva legislación, ya que entiende que “no ha pasado suficiente tiempo desde la implantación del Plan Bolonia”, y con anterioridad a dicha reforma “habría que haber hecho un análisis, una evaluación sobre lo que se ha hecho para ver si estaba bien o mal”.

En ese sentido, ha considerado “un poco de frivolidad” que “de pronto pasemos a un sistema prácticamente a la carta, que no es tan a la carta por determinadas circunstancias, y que puede alterar muchísimo el futuro de la vida de nuestros estudiantes”.

Y es que, según ha abundado Domínguez, la UNIA “está volcada con Latinoamérica”, y a los estudiantes que provienen de esa parte del mundo, que “ya tienen una estructura de '4+1'”, se les haría “un flaco favor si se impusieran los másteres de dos años”, porque tendrían que pasar “dos años aquí, con el gran perjuicio económico que conllevaría”.

Así las cosas, ha apuntado que “aunque oficialmente” se ha unido a la postura consensuada por los rectores de las universidades andaluzas para que “se aplace” la entrada en vigor de la reforma, realmente le pide “al ministro que la retire, que la repiense”, ya que, a su juicio, el “cambio de estructura” de los másteres, su paso de uno a dos años, podría ser “un gran revuelo, un agujero en el bolsillo”. “Son simples matemáticas, si un estudiante quiere hacer un máster y en vez de un año tiene que hacer dos, le va a costar el doble”, ha sentenciado.

LA JUNTA PIDE REFLEXIÓN

Por su parte, el secretario general de Universidades, Investigación y Tecnología de la Junta de Andalucía, Francisco Triguero, también ha mostrado, en declaraciones a los periodistas, un planteamiento crítico al respecto de dicha reforma, y ha abogado por la “reflexión” como el elemento que “debe primar en el ámbito universitario”.

Para Triguero, el Gobierno ha defendido que la reforma se ha realizado “para la internacionalización y la comparabilidad con Europa”, y “a lo mejor se han olvidado de otras partes del mundo que al menos son tan importantes” como el Viejo Continente.

Así, ha indicado que la “función de internacionalización” de la universidad “va más allá de Europa” --donde “ni siquiera es unánime el '3+2', según ha apostillado--, puesto que ”existen América, Asia y África“. Por ello, ha abogado por que la ”comparabilidad“ se realice ”no por duración de tiempo“, sino analizando cómo se funciona ”en Iberoamérica, Norteamérica, África o Asia“.

“Hay que reflexionar sobre las potencialidades y el valor añadido que se puede generar”, ha abundado el secretario general de la Junta, que rechaza “poner el '4+1' y mover a todas las universidades a ponerlo, y antes de terminar fijar el '3+2', y pasado mañana el '2,5 + 2,5'”.

“Eso no se puede hacer en un sistema que necesita estabilidad, donde hay conviviendo casi tres marcos de implantación de titulaciones”, ha opinado Triguero, que se ha mostrado crítico con incorporar un nuevo sistema “sin haber hecho una reflexión, sobre todo sin haber visto esa comparabilidad internacional, con quién y para qué”.

A su juicio, eso es lo que los rectores de las universidades plantearon en la reciente reunión mantenida con la presidenta de la Junta, Susana Díaz, donde se acordó “reflexionar, ver cómo evoluciona esto, cuál es nuestro objeto de intercambio de comparabilidad, y en función de eso tomar la decisión que sea pertinente”.

Según Triguero, “en el ámbito universitario debe primar la reflexión, y sobre todo definir por qué y para qué de las cosas”, y, en todo caso, ha recordado que en Andalucía “no se va a implantar” la reforma “en tanto en cuanto no se haga esa reflexión”, y no se va a “ver visto contaminado el proceso de financiación por esa decisión que puedan adoptar las universidades” en línea de “desarrollar y completar lo que está en marcha” antes que adoptar el cambio.