El Gobierno central aprueba el decreto que da seis millones de euros a Canarias para abaratar el agua de riego agrícola
El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes el real decreto que regulará la concesión directa de seis millones de euros a la Comunidad Autónoma de Canarias para mejorar la eficiencia energética en la gestión del agua que se usa para el riego agrícola. Esa partida es el resultado de una petición realizada por Nueva Canarias (NC) dentro de la negociación de los Presupuestos estatales para 2017.
Con esa subvención, el Ejecutivo canario desarrollará un programa de ayudas destinadas a las desaladoras y pozos subterráneos para el riego agrícola en las islas, destacó en un comunicado del Ministerio de Energía, Turismo y Agenda Digital.
Se podrán beneficiar de esas ayudas tanto las entidades públicas como las privadas que suministren agua para el riego agrícola procedente de pozos o de la desalación en Canarias.
Para el cálculo de las ayudas se tendrán en cuenta los costes en que incurran los beneficiarios para obtener el agua que luego se usa para riego agrícola. En todo caso, la eficiencia energética representará al menos la mitad de la valoración para el cálculo de cada subvención individualizada.
Estas ayudas serán un estímulo para la mejora de la eficiencia energética, ya que se primarán las entidades que tengan un mejor uso de la energía, tanto en la elevación de agua en los pozos como en los procesos de desalación.
El regadío es el principal consumidor de agua en la mayoría de las islas del archipiélago, con una superficie regada de 28.990 hectáreas (el 69,85% de la superficie cultivada).
La escasez de lluvias y las condiciones geodésicas de Canarias, que no permiten la construcción de grandes presas o embalses donde almacenar las aguas pluviales, ocasionan que las aguas de regadío procedan principalmente de fuentes subterráneas (galería y pozos) y de producción industrial (desaladas y depuradas). En ambos casos, el coste del agua se incrementa por el coste energético asociado a estos procesos de obtención de agua.
Con la ayuda aprobada este viernes, el Gobierno afirma que “responde a la solicitud del sector agrario canario”, que demandaba que se abaratasen los costes energéticos en la elevación o desalación del agua con uso final agrario.