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Ni pito ni pelota

Cristóbal D. Peñate

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Mal, muy mal tienen que estar en el Partido Socialista como para que se fijen en Susana Díaz como máxima lideresa. Es muy sintomático que los líderes históricos del PSOE, como se comprobó el domingo pasado, rindan pleitesía a una de sus dirigentes más mediocres.

Algunos barones del partido argumentan que apuestan por Díaz porque Sánchez los llevó a dos elecciones perdidas. No se acuerdan (o no se quieren acordar) de que Felipe González perdió dos elecciones frente a la UCD de Adolfo Suárez antes de llegar a ser presidente del Gobierno.

Esos botarates olvidan que Aznar perdió dos elecciones consecutivas frente a Felipe González antes de llegar a la presidencia del Gobierno. Esos mequetrefes tampoco se quieren acordar, a pesar de que está mucho más reciente, de que Mariano Rajoy perdió dos veces frente a Rodríguez Zapatero antes de ganar La Moncloa.

Los barones del PSOE tienen dos varas de medir y se olvidan de que Borrel ganó a Almunia, a pesar de que éste era el secretario general y tenía el respaldo del aparato del partido. Creen que, con sus grandes poderes y sus enormes dedos especializados en colocar a su antojo a la gente, lo tienen ganado de antemano. El aparato del PSOE ha hecho a Pedro Sánchez mejor de lo que es. Curiosamente, fue Susana Díaz la que apoyó a Sánchez para fastidiar a Eduardo Madina. El domingo pasado, en el acto de proclamación de la candidatura de la andaluza en Madrid, hasta Madina le hizo la ola. Allí estaban socialistas históricamente enfrentados: Felipe y Guerra, Zapatero y Bono, Rubalcaba y Chacón, Caín y Abel.

Los barones insisten en que Pedro Sánchez perdía elecciones mientras que Susana Díaz las ganaba, pero es una historia perversa, truculenta y tramposa. A Sánchez le dejó Rubalcaba el partido hecho unos zorros e hizo lo que pudo para mantenerlo. A Díaz sus predecesores Chaves y Griñán, imputados actualmente, le regalaron la presidencia sin presentarse a las elecciones. Y cuando lo hizo, aunque siguió siendo el partido más votado, perdió muchos votos y escaños en Andalucía.

Pedro Sánchez ha estado estos días en la islas e incluso corrió por Las Canteras con el alcalde de Artenara. Nadie se imagina a Susana Diaz corriendo y viviendo deportivamente. Como mucho se la imaginan jugando al parchís o a la oca, tirando porque le toca. Pero ahora no toca. Ni un pito ni una pelota. Aunque a ellas le han salido muchas desde que el aparato del partido la apuntaló

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