Sobre este blog

El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora

El PSOE, mosqueado; Coalición, no tanto

Casimiro Curbelo, junto a López Aguilar, Julio Cruz y Ventura del Carmen Rodríguez en los tiempos de vino y rosas dentro del PSOE.

Carlos Sosa

Las jugadas de estrategia, mayormente sin balón, se han reiniciado tras la constitución de los ayuntamientos este pasado sábado y el recuento del poder local que ha conservado, ha perdido, ha conquistado o ha mantenido cada una de las fuerzas presentes en el tablero político canario. El PSOE se ha alzado con el mayor número de concejales (375) y de alcaldías o grupos de gobierno en los que se ha integrado. Coalición Canaria ha sido relegada a un segundo puesto que no ha agradado a nadie, especialmente en Tenerife, donde ni siquiera los incumplimientos de los suyos y el regocijo que en algunos ambientes ha generado ha aliviado el escarnio. El disgusto ha disparado a los partidarios de cambiar de socio y retomar las negociaciones con el Partido Popular, que ofrece más sumisión (que ya es decir), y mandar al PSOE a la oposición ante la evidencia de que, al ritmo que van las cosas, podría desbancar en 2019 a los nacionalistas de la primera plaza regional. Dicen en CC que esa corriente existe, que no la pueden negar, pero que se reduce a unos pocos nostálgicos de la vieja ATI entre los que no quieren que contemos ni a Manolo Hermoso ni a Ani Oramas, a la que cuelgan en estos sectores el título de “la mayor defensora de un pacto con el PSOE”. Vamos a anotarlo por ahí. Nadie niega sin embargo que hay dos dirigentes nacionalistas en Tenerife que sí quieren pactar con el PP, la lideresa de Puerto de la Cruz, Sandra Rodríguez, que ya consumó el pacto, y el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso, que anda mareando la perdiz con un alegato en el que mezcla la disciplina de partido (se supone que la suya y la de los consejeros socialistas) con la defensa de Tenerife, para la que no parece que considere capacitados a sus socios del PSOE.

 

 

Un “compromiso” con Tenerife

En la parte de “compromiso con la isla de Tenerife”, Carlos Alonso ha desgranado diecisiete acciones que le tiene que aceptar quien quiera ser su próximo socio en el Cabildo. El 99% de esas medidas son de carácter social, para rescatar a la gente de las garras del desempleo y de la desigualdad… Ay, perdón, el 99% de esas medidas se refiere exclusivamente a la ejecución de obras públicas, sin que se especifique en ninguna de las acciones nada en materia social, si exceptuamos la construcción de hospitales y la transferencia de la competencia de empleo a los cabildos. Son medidas que el PP le firmará de buen grado porque, aunque incluyen compromisos que debería asumir el Estado, la inminencia de unas elecciones generales colocará a los de José Manuel Soria en una magnífica coyuntura para prometer lo que sea menester. Mientras que para la lideresa de Puerto de la Cruz se anuncian medidas disciplinarias por no haber votado al PSOE, la fuerza más votada, en el pleno del sábado, nadie en Coalición Canaria está en condiciones de asegurar que se vaya a presionar, y mucho menos a expedientar, al presidente del Cabildo. Alonso se ha tomado con mucha calma el comienzo de las negociaciones para formar gobierno en la primera Corporación insular, lo que significa que estaba esperando a que se constituyeran los ayuntamientos para irse cargando de razones y hacer a continuación lo que considere más adecuado, es decir, pactar con el PP, a pesar de sumar de sobra con el PSOE (17, dos sobre la mayoría absoluta). Su balance de lo ocurrido el sábado se redujo este lunes a resaltar que de dieciséis ayuntamientos que en Tenerife debieron ser del pacto CC-PSOE, o viceversa, sólo hubo éxito en cinco. Claro que, en aplicación de la doctrina más extendida en CC, los culpables seguramente habrán sido los perversos socialistas. Se afianza cada vez más la tesis de que el presidente del Cabildo tomará posesión y no delegará competencias a la espera de lo que ocurra en La Laguna, donde CC espera que Javier Abreu se porte como un disciplinado dirigente socialista y vote al candidato nacionalista para gobernar con él en minoría hasta que el cuerpo aguante. Para forzar a Abreu, José Miguel Ruano ha patentado la teoría que lleva su nombre: la teoría Ruano, consistente en proclamar al mundo que Bermúdez dejó en la estacada al PSOE porque no sumaba con CC, lo que también ocurre en sentido inverso en La Laguna, salvo por el hecho nada despreciable de que teóricamente el pacto obliga a apoyar siempre al candidato de la lista más votada. Como el PSOE en Puerto de la Cruz, mira tú qué cosas.

 

El día 19, fin del culebrón

La mesa del pacto seguirá desempeñando su papel mientras se van resolviendo los conflictos, aplacando las venganzas y aplicando las medidas disciplinarias, si es que se aplica alguna. El PSOE va a exigir más poder institucional dada la larga lista de incumplimientos que ha protagonizado su inminente socio, pero será una exigencia moderada dado el terror que han extendido las fuerzas vivas de ATI a un reencuentro con el PP. Ya se rumorea que una socialista, Carolina Darias, ocupará la presidencia del Parlamento y que habrá una notable presencia de consejeros y consejeras de Gran Canaria dado el efecto que va a ocasionar que el presidente y el vicepresidente del Gobierno sean naturales y vecinos de Tenerife. A lo que se añadió este martes la certeza casi absoluta de que CC no entrará en el gobierno del Cabildo de Gran Canaria gracias a un (¡por fin!) inteligente cambio de estrategia de Podemos, que envió a negociar a dos de sus consejeros junto al secretario insular de la isla con unas propuestas más sensatas y terrenales. A Bañolas tratarán de recolocarlo en algún puesto que le de relumbrón a CC de Gran Canaria, hecha pedazos tras ser arrollada en las urnas el 24-M. Todo se resolverá, en definitiva, el próximo día 19, cuando se designen las personas que formarán la Mesa del Parlamento, el Gobierno de Canarias (presidente, vicepresidenta y consejeros y consejeras), el Cabildo de Tenerife y el Ayuntamiento de La Laguna. Luego, toda la mesa del pacto a cruzar los dedos, que puede pasar de todo.

 

Las otras opciones

Puede pasar, por ejemplo, que el pacto PSOE-CC no llegue a buen puerto. El Partido Popular se ha ofrecido a Coalición Canaria en verso y en prosa, de pie y de rodillas, y algún recadito ya le ha llegado a Casimiro Curbelo (Agrupación Socialista de La Gomera) para que estudie sumarse a un acuerdo con populares y nacionalistas y alcanzar así 33 votos en el Parlamento. El gomero se hace el loco pero no descarta nada. Sabe que sus tres diputados pueden convertirse en cruciales en cualquier momento, tanto para parir un pacto como para detener una crisis que pueda producirse. Pero un acuerdo de Clavijo con Soria soliviantaría sin remisión a las huestes majoreras, cuyos tres parlamentarios difícilmente apoyarían un gobierno así. Lo que nos conduce a otra opción algo más sandunguera, la del pacto de progreso de hace treinta años. En esta ocasión serían otros los actores, aunque repetiría el PSOE como fuerza más votada, acompañado para la ocasión por Podemos, Nueva Canarias, Agrupación Socialista Gomera y esos tres diputados de Asamblea Majorera. El resultado, 33 votos, supondría enviar a la oposición, por primera vez juntos en ese trance, a Coalición Canaria y el PP, el sueño más acariciado de muchos partidos políticos a este lado del río Pecos. Sólo que esta opción se tropieza con varias dificultades: la primera, que Podemos aceptara el batiburrillo, que el PSOE aceptara a Curbelo y, la que sería previa a todas las demás, que el gomero se sentara a negociar con el PSOE sin que antes le sirvieran en bandeja de plata la cabeza de su enemigo íntimo, Julio Cruz, al que responsabiliza de todos sus males, empezando por su expeditivo apartamiento de las listas electorales. Claro que, para entonces, Cruz ya se habrá blindado astutamente en la Mesa del Parlamento para ser más inatacable de lo que ya lo es en la actualidad como miembro de la mesa negociadora del pacto.

Sobre este blog

El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora

Etiquetas
stats