'Pringando' en Navidad
¿Qué tienen en común una enfermera, un bombero y un periodista? Pues si trabajan los tres en Navidad, Fin de Año o Reyes, que son unos pringados, como suele llamarse a aquellos que tienen que trabajar mientras el resto del país disfruta de estas fechas tan señaladas.
Mientras usted está sentado con toda la familia contando chistes y poniéndose fino con el jamoncito de bellota en la cena de Navidad, o viendo doble después de las campanadas de Fin de Año o disfrutando de los regalos del día de Reyes, hay mucha gente que tiene que trabajar en esas señaladas y especiales fechas. Algunos lo hacen por dinero y otros porque les toca, pero a ninguno le hace gracia... son los pringados de Navidad.
Yessica Martín tiene 24 años y es enfermera. A estas alturas ya está acostumbrada a tomarse las uvas con sus compañeras del centro de salud de Mogán después de haber pinchado a algunos pacientes y haber hecho algunas curas. “Siempre organizamos algo, uno trae las uvas, otro el confeti, otro la comida, y no se pasa tan mal”, dice, aunque enseguida reconoce que “lo que peor llevo es trabajar la Nochebuena, porque fin de año es una fiesta más, pero Navidad es de las pocas excusas que hay para estar con toda la familia”.
Y es que esta joven enfermera sabe muy bien lo que es pringar en fechas señaladas. Estas Navidades se las goza todas: Nochebuena, Fin de Año y día de Reyes. Admite que lo peor es trabajar el día 1 de enero, porque después del alcohol y la fiesta, llegan los heridos por peleas, accidentes, “y hasta el típico que se atraganta por comer uvas”.
Y, ¿por qué trabajas entonces en estas fechas? “Por turno, y por dinero, pagan el doble esas horas”. Clarito está. Quienes no tienen la oportunidad de elegir por dinero esas fechas son los bomberos de Las Palmas de Gran Canaria. El cabo de Servicio, Alexis Rodríguez, nos cuenta que es “un día totalmente normal” para los bomberos.
A quien le toque el turno de Navidad o de Fin de Año comenzará a trabajar, como siempre, a las 06.45 de la mañana hasta la misma hora del día siguiente. De nuevo, la peor fecha es el día 1 de enero porque los bomberos están en todos los accidentes de tráfico complicados, y reconocen que es un día “de mucho movimiento e incidentes”.
“No es la primera vez que me cortan la décima uva para tener que irme corriendo a algún accidente”, comenta con resignación el cabo, tras reconocer que los compañeros que pringan juntos siempre organizan una pequeña fiestita para hacer más llevadero el día. ¿La peor fecha? “Pues personalmente, que tengo niños, el día de Reyes, porque me pierdo la cara de ilusión de los chiquillos cuando abren los regalos, y eso es impagable”, explica.
Noticias 24 horas
Otro colectivo que tiene que pringar en fechas señaladas es, como no podía ser menos, el de los periodistas. Y es que la actualidad no se toma vacaciones, como comenta un periodista de un prestigioso periódico de Las Palmas, Raúl Gil. “Me ha tocado trabajar los dos últimos fines de año, y por fin me toca en Navidad”, dice con aire de satisfacción.
Porque hay una sutil diferencia: “en Navidad no hay actividad política, ni institucional de ningún tipo, está todo muy parado y te dedicas el día a editar noticias y reportajes de tus compañeros, pero el día 1 toca siempre levantarte temprano para ir a comentar la fiesta que no has podido disfrutar”.
¿Y por qué pringa Raúl en estas fechas señaladas? “Además de porque me toca, porque pagan muy bien”... Si está claro que el fervor religioso se apaga bien con una buena suma de dinero. Moraleja, si bien pagado, no tan pringado.