En busca de los dominios '.ic' y '.can'
El grupo parlamentario de Coalición Canaria reclamará a través de una Proposición no de Ley (PNL) en el próximo pleno de la Cámara autonómica al Gobierno regional “que inicie la promoción de cuantas iniciativas sean necesarias para la creación, gestión y control del registro del nombre de dominio '.ic', por ser las Islas un territorio con circunstancias geopolíticas especiales y con un régimen fiscal diferenciado, al ritmo que permita la crisis económica”.
Asimismo los nacionalistas quieren que el Gobierno promueva “también” acciones para crear, gestionar y controlar del registro del nombre de dominio '.can' para “la promoción de las particularidades lingüísticas del español hablado en Canarias y la cultura canaria en el ámbito de Internet y de las nuevas tecnologías de la información”.
Por ello, CC solicita al Ejecutivo que se dirija formalmente a la Corporación de Internet para la Asignación de Nombres y Números (en inglés, ICANN) -encargada de la gestión de la asignación de nombres de dominio de primer nivel y direcciones IP y dependiente del Gobierno de Estados Unidos- solicitando que “prohíba expresamente que se utilice el dominio '.can' para páginas perros (can en latín), a no ser que tenga que ver con la cultura canaria”.
El texto impulsado por la diputada Dulce Xerach Pérez también busca la implicación del Gobierno del Estado, “a fin de que apoye esta iniciativa conjuntamente con el Ejecutivo regional” y de los cabildos insulares.
Inactividad del Gobierno
El pasado mes de septiembre el Grupo Radiotvib Networks, una empresa canario-madrileña, apoyó públicamente la iniciativa popular sobre la petición del dominio '.ic' para las Islas Canarias. Radiotvib expuso en un comunicado que “con este nuevo dominio se potenciaría en las islas el mercado en Internet y se le daría voz propia a las Islas en la red”.
Radiotvib criticó, también, la actitud del Gobierno de Canarias sobre este tema. La empresa cree que la potenciación de este dominio junto con un conjunto de medidas estructurales potenciarían una industria poco extendida en las Islas. “De nada sirve que Tenerife acoja el NAP si no hay un impulso a la industria informática, del software y de Internet”, concluyen.