Las Palmas de Gran Canaria extiende su 'Zona libre de acoso' a 23 colegios de la ciudad
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha renovado su compromiso contra el bullying al extender la Zona libre de acoso a 23 colegios de la ciudad, una iniciativa que en su tercer año sigue combatiendo un problema que afecta a uno de cada tres menores en el mundo, según la Unesco.
El alcalde, Augusto Hidalgo, ha firmado el proyecto este martes en el centro de enseñanza Simón Pérez con los responsables de los colegios públicos Manolo Millares y La Higuerita, el IES Cruz de Piedra -primer instituto que se adhiere al programa- y el colegio Arenas, y ha destacado el papel desarrollado por la Unidad Protección y Acompañamiento (Upal) de la Policía Local.
Hidalgo ha subrayado que el objetivo de la Zona libre de acoso es “consolidar una red de lucha contra el bullying en la que se integren la administración local, la comunidad educativa y, de forma especial, los menores, ya que suelen ser ellos los primeros en conocer las situaciones de acoso en las aulas”.
El regidor ha destacado que, desde la puesta en marcha de este programa municipal, el número de casos de intimidación en los centros escolares de la capital grancanaria ha descendido de forma progresiva, ya que se detectaron seis casos en el curso 2017-18, dos en el 2018-19 y uno en el actual periodo.
“Desconocemos si esta dinámica decreciente ese extiende a todos los centros escolares de la ciudad, pero nuestra idea es que en el futuro los 56 colegios del municipio estén dentro del proyecto Zona libre de acoso”, ha agregado.
Augusto Hidalgo ha dicho que en el pasado año los agentes de la Upal realizaron 39 visitas a colegios repartidos en todos los distritos para sensibilizar al alumnado, profesores y familias de la necesidad de prevenir y detectar casos de acoso, poniendo el foco de atención en la “mayoría silenciosa”.
El alcalde ha elogiado la labor de los miembros de la Upal y ha agradecido el compromisos de los colegios capitalino con la implementación del programa para “combatir un problema social que, lamentablemente, está muy presente en nuestra sociedad y que puede causar grandes daños a los menores”.
Con la Zona libre de Acoso los policías locales intervienen desde la figura del agente tutor y trabajan con alumnos que quieren convertirse en mediadores tanto con las posibles víctimas como con el acosador.
El concejal de Seguridad y Emergencias, Josué Íñiguez, ha dicho que la Upal representa “un paso más en la construcción de una policía social y cercana, pegada a la realidad y que actúa y previene ante situaciones de vulnerabilidad como el acoso escolar.
El edil ha añadido que la labor que desarrolla los agentes de la Upal no sustituye a los protocolos que tiene la Consejería de Educación del Gobierno canario, sino que “abunda en el desarrollo de acciones preventivas”.
Este acto, que ha contado con la participación de unos 200 alumnos, desarrolló una representación de una obra teatral en la que los actores dieron visibilidad al fenómeno del acoso escolar.
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