Oposición frontal en Cantabria a las pruebas de evaluación en Primaria
La Plataforma en Defensa de la Educación Pública de Cantabria ha reiterado su oposición a la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) y ha reclamado a la Consejería de Educación que retire las pruebas de evaluación como ya han hecho cinco comunidades y en especial de la 3º de Primaria, prevista para el próximo mes de junio.
El colectivo lo ha pedido a través de un comunicado en el que ha considerado que estas pruebas “no supondrán ningún avance ni beneficio” y solo buscan ir “segregando” al alumnado. En este sentido, ha apoyado la propuesta de la Confederación Española de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA) llamando a las familias al boicot de estas pruebas.
Desde la plataforma se ha criticado que sea una evaluación diseñada de “modo externo” a los centros educativos, otorgándole más importancia que al trabajo diario de los tutores y maestros. “Ya existe numerosa normativa tanto estatal como autonómica sobre el currículo y la evaluación en esta etapa”, ha señalado.
Al respecto, ha opinado que la aplicación de estas pruebas de evaluación “refleja la desconfianza o la incompetencia para controlar el correcto desarrollo del proceso educativo de las propias administraciones educativas hacia el trabajo de los profesionales docentes, hacia la normativa que ellos mismos han aprobado y hacia el papel de supervisión del Servicio de Inspección Educativa”.
Así, desde la plataforma critican la “hipocresía de la LOMCE”, una ley que en su preámbulo defiende de “forma retórica” la diversidad de talentos e intereses del alumnado pero que “luego mide su éxito educativo en base a pruebas estandarizadas y homogéneas”.
“Criticamos igualmente la hipocresía de unas administraciones educativas que se llenan de propaganda sobre la autonomía de los centros educativos para luego aplicar unas pruebas estandarizadas que condicionan de forma evidente todo el proceso de enseñanza-aprendizaje y la medición del éxito educativo”, apunta el comunicado.
Por último, han denunciado la “indefinición” de la Consejería de Educación de Cantabria que “para el alumnado con adaptación no significativa no concreta cómo deben adaptarse las pruebas más allá de cuestiones tan superficiales como adaptar el lugar del examen o la duración del mismo o poner traductores para alumnado extranjero o sordo”.
En el caso del alumnado con trastorno de la comunicación y el lenguaje, el colectivo ha indicado que se contempla como medida a adoptar la modificación del formato de la prueba “sin especificar en qué sentido se debe modificar, ni quién debe modificarla, ni, sobre todo, qué sentido tendrá posteriormente utilizar sus calificaciones cuando han realizado una prueba diferente”.
“Rechazamos un modelo de evaluación centrado en los contenidos y que se limita a evaluar las competencias básicas (de las ocho que existen según la ley) y tres asignaturas (Lengua Castellana, Lengua Inglesa y Matemáticas)”, han señalado, añadiendo que, frente a ello, la plataforma ha defendido un modelo de educación integral.
Desde el colectivo, también han denunciado la “escasísima información” que tanto el profesorado como las familias han recibido sobre las “consecuencias académicas y pedagógicas” de las evaluaciones para el alumnado y para el centro/profesorado, cuando la propia LOMCE señala que “de resultar desfavorable esta evaluación, el equipo docente deberá adoptar las medidas ordinarias y extraordinarias más adecuadas”.
Igualmente, en el Real Decreto 126/2014 que establece el currículo de Educación Primaria, en el artículo referido a la Promoción del alumnado se dice que “se atenderá especialmente a los resultados de las evaluaciones individualizadas de tercer curso de Educación Primaria y final de Educación Primaria”.