El Consejo de Ministros ha aprobado hoy un real decreto por el que traspone al ordenamiento español las modificaciones introducidas en la directiva de la Unión Europea que modifica la norma de calidad relativa a la miel.
Esta norma, impulsadas durante la Presidencia española del Consejo en el segundo semestre de 2023 y culminadas en 2024, mejora el etiquetado de este producto obligado a que se indique en el campo visual principal de la etiqueta el porcentaje que representa cada uno de los países de origen de la miel, en el caso de las mezclas, una demanda largamente demandada por el sector producto español.
Además, con esta modificación se elimina la variedad miel filtrada y se establece que, aquella a la que se le haya retirado una parte importante del polen, será considerada miel para uso industrial, y no podrá comercializarse directamente al consumidor final. El polen es un componente clave de la miel y proporciona un vínculo con su origen botánico.
Sin embargo, los productores no están satisfechos con esta nueva norma, y así lo señalaron el pasado año cuando se inició el trámite para trasponer esta directiva, porque considera que está aún lejos de las exigencias de los apicultores y de las organizaciones que los representan.
Una de las demandas que realizan es que la UE modifique la norma que permite la triangulación de la miel, es decir, que mieles que entran desde terceros países se mezclen con miel europea y puedan ser etiquetadas como miel española o de otros países de la UE.
Más calidad y pureza para la miel
Según el comunicado del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, con la incorporación de esta modificación a la legislación nacional, se pretende proteger y aumentar la competitividad de las mieles de origen español y reforzar el mercado nacional, al dotarlo de mayor transparencia e información, y posicionar los productos frente a las mieles importadas.
Además, la norma garantiza que el producto que llega al consumidor no ha sido desprovisto de las sustancias o ingredientes naturales que le confieren sus propiedades características y cumple con los criterios de composición, calidad y pureza que establece la normativa.
Sector apícola en España
Según los datos del Ministerio, el censo de colmenas es de más de 2,8 millones entre los dos sistemas productivos, estante y trashumante, la producción final en 2023 se situó en 27.423 toneladas.
España cuenta con 36.893 explotaciones, de las que alrededor del 17 % son profesionales (las que reúnen más de 150 colmenas), lo que supone el nivel de profesionalización del sector apícola más alto de la Unión Europea. De hecho, el 80 % de la producción procede de la apicultura profesional.