Administración y ONG: alianzas que fortalecen la conservación del medio ambiente

Para las ONG dedicadas a la conservación de la naturaleza es más que necesaria la colaboración con las entidades que desarrollan su actividad en el medio natural: mundo agrario, empresas, centros de investigación o docentes (universidades, institutos y colegios). Además, la colaboración con la administración local es de crucial importancia ya que permite llegar a la ciudadanía y trabajar en superficies de gran interés que no suelen contar con presupuestos llamativos, pero sí con activos naturales de gran valor.

Los Ayuntamientos juegan un papel clave dando continuidad en el tiempo a los proyectos que emprenden las ONG. Al aunar fuerzas para promover y alcanzar objetivos comunes, se establecen relaciones de confianza, y un marco de actuaciones y actividades que se desarrollan conjuntamente.

Este es el caso de la Fundación Global Nature y algunas corporaciones municipales en Castilla-La Mancha. Ángeles Pontes, técnico de la Fundación, desarrolla su trabajo en el marco de un convenio que la ONG ha suscrito con el Ayuntamiento de Villacañas: “Para que los acuerdos de colaboración cumplan sus objetivos, se deben gestionar de manera coordinada”.

Actualmente la Fundación cuenta con convenios de colaboración firmados con varios ayuntamientos de la región. Estos acuerdos toman diferentes formas dependiendo de los proyectos y del marco de actuación; algunos llevan más de una década vigentes. A través de los convenios se han puesto en marcha programas de educación ambiental, acciones formativas sobre agricultura y medio ambiente, proyectos de conservación de hábitats y especies amenazadas o actividades de voluntariado ambiental, entre otras.

Como ejemplo de coordinación con administraciones locales, el proyecto ‘LIFE Estepas de La Mancha’ desarrolla una importante campaña de sensibilización escolar llegando a alumnos de infantil, primaria, secundaria y centros de educación especial de 57 municipios manchegos, donde se trabajan contenidos sobre aves como el sisón, la avutarda o el cernícalo primilla. De igual forma, este programa, desarrollado en 9 términos municipales de Cuenca, Toledo y Ciudad Real, ha llegado gracias a estas colaboraciones con la administración local a más de 8.000 escolares, que pudieron conocer de primera mano la importancia de 27 humedales esteparios de su entorno.

Las ONG y los ayuntamientos trabajan codo con codo y se apoyan en la organización de actividades como la celebración de días relacionados con el medio ambiente (Día del Árbol, Día de los Humedales, etc.), el diseño y realización de actividades turísticas como rutas de cicloturismo o visitas guiadas a los espacios naturales, e incluso concursos de educación ambiental que dan a conocer los principales valores del entorno para concienciar de la necesidad de su protección y conservación.

A lo largo de estos años, gracias a las colaboraciones entre administración y ONG, la sensibilidad hacia los valores naturales tanto de la esfera política como de la población en general ha ido en claro aumento. “En los comienzos encontrábamos un gran desconocimiento acerca de nuestros Espacios Naturales y concretamente sobre las lagunas y humedales. Ahora los habitantes de esta zona se sienten orgullosos de su patrimonio natural”, menciona Ángeles Pontes.

La educación ambiental es la clave para difundir y dar valor a estos Espacios Naturales, y la Fundación Global Nature y el Ayuntamiento de Villacañas han apostado por ello. Juntos han llevado a cabo multitud de actividades (visitas a las lagunas, recogida de semilla de vegetación de saladar, retirada de basuras en entornos naturales, restauración de hábitats, etc.) implicando a toda la población, desde los escolares hasta la tercera edad, asociaciones o personas con distintos tipos de discapacidad.

Son muchas las anécdotas que puede contar Ángeles de estos años de trabajo. Ella se queda con algunas frases de niños y mayores como: “No reconozco la laguna larga, hace años venía a vendimiar y no podíamos estar mucho tiempo por el olor y la cantidad de basura que había. Ahora vengo con mis nietos a ver las aves y pasar la tarde, ¡cómo ha cambiado! Habéis hecho una buena labor”. Un pequeño se muestra orgulloso de saber qué comen las aves del humedal de su pueblo: “…y los flamencos comen gambitas, como los gambas que echa mi madre a la paella.”