La tercera ola y otras patologías llevan a máximos históricos la ocupación de las UCIs de Valladolid, Salamanca y León

La tercera ola y otras patologías llevan a máximos históricos la ocupación de las UCIs de Valladolid, Salamanca y León. Las unidades de críticos de estas tres provincias nunca habían atendido tantos pacientes, ni siquiera durante la primera ola. A pesar de que ahora se conoce más el coronavirus, todavía no existe un tratamiento conocido

288 de los 406 pacientes más graves (UCI) tienen coronavirus. Antes de la pandemia, Castilla y León tenía 166 camas de UCI, que se han ampliado hasta 331 con obras y habilitándolas en otros espacios. Sin embargo, esta cifra también resulta insuficiente y, salvo Ávila y Zamora, todos los hospitales han necesitado extender sus unidades de críticos utilizando UVIs y REAs para esta patología. Esta situación tensiona a los servicios sanitarios de la comunidad, que se sienten agotados, maltratados e ignorados por las administraciones públicas ni por los ciudadanos.

Mientras los datos apuntan a una relativa estabilización de los contagios -que siguen creciendo-, los hospitales se ven cada vez más y más llenos. Solo en lo que va de semana, han ingresado en el hospital 793 personas, han recibido el alta 639 y han fallecido otras 113 solo con esta enfermedad respiratoria. Actualmente hay 290 personas intubadas en toda la comunidad. En Castilla y León, siete de cada diez pacientes de UCI tienen la COVID-19; una proporción todavía mayor en El Bierzo (84%) y el Río Hortega de Valladolid (81%).

Sin embargo, las UCIs no son las únicas unidades con alta ocupación. A principios de semana, se empezaron a ocupar camas en el gimnasio del Hospital de Palencia y el salón de actos del Hospital de Segovia. Ni Salamanca ni Soria habían tenido jamás tantos pacientes hospitalizados. La COVID-19 va ocupando cama tras cama y llena planta tras planta. Según ejemplificó el jueves el vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, estos ingresos son tan elevados que pueden suponer, como en el caso de Palencia, una planta entera llena de un día para otro.

La mitad de los pacientes hospitalizados en Segovia, Palencia y el Hospital Santiago Apóstol (Miranda de Ebro) tienen COVID, una sola patología que ha matado ya a 8.926 personas en Castilla y León, según los registrados de la Junta. Los ingresos continúan subiendo y suponen casi la mitad de las hospitalizaciones también en el Hospital Río Hortega de Valladolid y en el de Medina del Campo (Valladolid).

Los hospitales de la comunidad se enfrentan al reto de tratar a los pacientes de COVID-19, pero también a los que tienen otro tipo de patologías, algo que resulta más sencillo cuanto menor es la incidencia del coronavirus. Sin embargo, tener pocos pacientes de COVID en planta no garantiza una mejor situación de las UCI, aunque pueda ayudar. De momento, el único gran hospital que tiene menos pacientes tienen de COVID-19 es el de Burgos, con una ocupación COVID del 16% en su planta. Sin embargo, más de la mitad de 50 los pacientes de la UCI de Burgos tienen coronavirus.

Este jueves, algunos hospitales de Castilla y León han registrado su máximo número de pacientes en planta (COVID y no COVID), como Soria (215) o Salamanca (678), pero no son los últimos con una tendencia creciente en los últimos días.

Las próximas semanas prometen ser todavía más complicadas que esta y se prevén muchos más muertos. La semana pasada fallecieron 168 personas en Castilla y León con coronavirus. Solo del lunes al miércoles, han muerto ya 102 personas más.

Ante esta situación, Francisco Igea anunció el jueves por la noche nuevas medidas “en las próximas 24-48 horas” en las zonas “con una incidencia más descontrolada”. Actualmente continúan en vigor el toque de queda a las 20.00 horas, el cierre del interior de la hostelería, el de los gimnasios y centros comerciales, el cierre provincial y el límite de reuniones a cuatro personas no convivientes y 25 en iglesias y espacios de culto religioso.