El Govern asegura que el turismo “facilita la situación explosiva” del COVID-19 en Catalunya

No han sido solo los jóvenes. El Govern ha situado por primera vez el turismo como uno de les elementos que ha llevado a la “situación explosiva” del coronavirus en Catalunya. Para intentar contener el avance de la pandemia, el Ejecutivo catalán espera que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) dé su visto bueno al toque de queda nocturno en 161 municipios, tres más que los anunciados este miércoles. El Govern no ha registrado la petición hasta este jueves al mediodía y la decisión judicial previsiblemente se conozca este viernes.

Preguntado por cómo Catalunya ha llegado al top-5 de regiones europeas con más contagios, el conseller de Salud, Josep Maria Argimon, ha reiterado el cóctel explosivo formado por la variante delta, más contagiosa, y el aumento de la interacción social de los jóvenes con el fin de curso, los viajes y la verbena de Sant Joan. Pero a estos dos factores ha sumado el hecho de Catalunya como referente turístico.

“El destino turístico importante que es Catalunya facilita el hecho de que se pueda dar una situación explosiva”, ha aseverado Argimon, que ha contrapuesto la situación que se vive en la comunidad con el Reino Unido, donde es obligatoria la cuarentena a la llegada al país. “Reino Unido ha sido mucho más restrictivo con la entrada de personas”, ha zanjado Argimon, que no obstante ha agregado: “Sigo preguntándome por qué en territorios con características parecidas a Catalunya no tienen esta explosión de casos”.

A la espera del TSJC

Aunque los jueces todavía no han avalado el confinamiento entre la 1:00 y las 6:00 horas durante una semana solicitado por el Govern, la portavoz del Ejecutivo, Patrícia Plaja, ha augurado que el toque de queda tendría que estar en vigor otras dos semanas para notar sus efectos en el número de contagios. De aceptar los jueces el toque de queda propuesto por el Govern, afectaría a más de 6 de los 7,5 millones de habitantes de la comunidad.

Y eso que el Govern ha relajado las exigencias a la hora de pedir el toque de queda porque si el criterio hubiera sido el internacional de riesgo alto –125 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días– hubiera tenido que pedirlo para toda la comunidad, algo inviable sin estado de alarma. Finalmente el listón se ha fijado en los 400 casos por cada 100.000 habitantes en los últimos siete días.

Pese a que los servicios jurídicos del Govern advirtieron de que el toque de queda no podía ser generalizado, la portavoz de la Generalitat ha insistido que se trata de una medida “quirúrgica”, tal y como este miércoles dijo el president, Pere Aragonès. La solicitud del Govern ha quedado registrada pasadas las 13:00 horas y antes de tomar una decisión los jueces requieren del informe de la Fiscalía. A los 158 municipios afectados se les ha sumado Santa Cristina d'Aro (Girona), Caldes d'Estrac (Barcelona) y Altafulla (Tarragona).