El nuevo alcalde de Girona en sustitución de Carles Puigdemont, Albert Ballesta, ha llegado a un pacto con Ciutadans y PP para aprobar el cartapacio del Ayuntamiento el próximo jueves en el pleno extraordinario, un cartapacio que contempla un aumento de su sueldo hasta los 73.000 euros, el sueldo que hasta ahora tenía el gerente municipal, un cargo que queda eliminado del nuevo organigrama.
En declaraciones esta semana a Europa Press, Ballesta, que se proponía un sueldo que podía llegar a los 75.000 euros, ha defendido este aumento de su retribución afirmando que “no es el sueldo de Albert Ballesta, es el sueldo del alcalde de Girona” y en su opinión esto es diferente. Su predecesor, el ahora president Puigdemont, no tenía sueldo como alcalde porque ya estaba remunerado como diputado en el Parlament y solamente cobraba las dietas.
El alcalde de CDC, que cumple un mes en el cargo, asegura que “no se está reclamando nada que no sea” equiparable en comparación a otros consistorios y alcaldes de pueblos y ciudades similares a las de Girona.
Ballesta dijo contar con el apoyo de ERC para la aprobación del cartapacio, como ya hicieron con Puigdemont como alcalde, pero finalmente ha tenido que buscarlos en otro extremo del hemiciclo. Los republicanos le exigían un sueldo menor y la reducción de la mitad de cargos de confianza. Por su lado, las portavoces de C's y PP han asegurado que han pactado una propuesta por responsabilidad ante el mes de parálisis que arrastra el consistorio.