La Junta de Castilla-La Mancha habla de “fraude” en las “inútiles” Cumbres del Vino
El diputado de Podemos, David Llorente, ha agradecido que se plantease un debate en las Cortes regionales que incidiese en un sector importante en la región, como es el vino en Castilla-La Mancha. A pesar de que el Gobierno regional ya había anunciado que suprimiría este evento, las Cortes acogieron un acalorado debate en el que intervino también Francisco Martínez Arroyo, actual consejero de Agricultura. Arroyo realizó acusaciones muy graves, como el posible fraude que habría cometido el Gobierno de María Dolores de Cospedal al asignar la organización de estos eventos a la Empresa de Gestión Medio Ambiental regional, GEACAM. Esto, señaló el consejero, constituye un fraude a la legislación en la materia de contratación pública ya que la empresa realizó contratación de servicios para la Junta.
No fue el único dato polémico que anunció Martínez Arroyo. El consejero de Agricultura aseguró que la celebración de ambos eventos, uno en 2013 y el siguiente en 2015, supuso un gasto de poco más de dos millones de euros en dinero público, pero que los ingresos sólo ascendieron a un total de 241.706 euros. Además, Arroyo aseguró que el gasto en publicidad de los eventos en medios de comunicación llegó a los tres millones de euros. Además, ha señalado que el total del gasto está pendiente de pago, lo que se corresponde a alrededor de 1,7 millones de euros que la Consejería de Agricultura debe a GEACAM. Con estos motivos, el consejero no ha dudado en calificar los eventos como “inútiles e innecesarias”.
En este sentido, el consejero de Agricultura ha acusado al Gobierno de María Dolores de Cospedal de mentir a la ciudadanía, ya que se anunció que los eventos no significarían gasto alguno para la ciudadanía, mientras todavía siguen deudas pendientes de dinero público. Arroyo ha señalado, además, que en la primera edición celebrada en 2013, no se asignaron partidas presupuestarias, por lo que era “sencillamente imposible ejecutar gasto alguno, ya que no se encontraba contemplado”. Las pérdidas de la primera edición llegaron a los 956.000 euros, mientras que en la segunda de 798.000. En la última versión del evento, de hecho, sólo se logró recaudar un total de 3.706 euros en concepto de entradas.
Para el consejero de Agricultura, lo más grave es que el “desembolso no ha servido para nada”. En este sentido, Martínez Arroyo ha señalado que la gestión se dedicó a una empresa cuyo objeto social no tenía nada que ver con su cometido, obligando a GEACAM a incurrir en un “gasto innecesario”, mientras los trabajadores sufrían un grave Expediente de Regulación de Empleo. “Nadie solicitó la celebración de esta cumbre”, aseguró Martínez Arroyo, quien justificó la falta de interés en que sólo se consiguió tres patrocinadores en la primera cumbre, un panorama “evidentemente desolador”. Pero la crítica más dura fue la falta de apoyo que sufrió una feria establecida hace más de una década en la región, FENAVIN, organizada por la históricamente socialista Diputación de Ciudad Real. En este sentido, señaló que la feria ciudadrealeña recibió unos setenta mil visitantes profesionales y la presencia de todas las comunidades Autónomas, así como más de 1.300 bodegas.
En esto ha coincidido también David Llorente, portavoz del grupo parlamentario de Podemos, quien ha señalado que “no tiene sentido” contraprogramar los dos eventos, así como encargar la gestión de las Cumbres a una empresa que se dedicó a contratar a fundaciones privadas “por cuyas puertas giratorias circulan también altos cargos” y para “financiar medios de comunicación afines”. “No lo podemos apoyar, lo haga quien lo haga”, aseguró el parlamentario. Por su parte, el PP decidió atacar al PSOE asegurando que quieren destruir Castilla-La Mancha, y señalando a Emiliano García-Page como el principal responsable que sólo quiere “terminar” con todo lo que empezó María Dolores de Cospedal en la región.
