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Mónica Oltra, sobre la reapertura de su causa: “Mi pena va a ser sentarme en el banquillo, porque no hay nada”

Miguel Giménez

València —
11 de julio de 2025 11:16 h

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El pasado mes de mayo, la Audiencia de Valencia confirmaba el procesamiento de la excvicepresidenta valenciana y exconsellera de Igualdad y Políticas Inclusivas con el Botànic, Mónica Oltra; un hecho que se producía después de que ni el juez instructor ni el fiscal hallaran indicios de delito en la actuación de la exdirigente de Compromís en el caso de los abusos de su exmarido, siendo educador, a una menor tutelada por la Generalitat Valenciana.

Oltra explicaba su caso y cargaba duramente, en un acto organizado hace unos días por Acción Contra el Odio, contra la decisión de la Audiencia de Valencia de reabrir la causa. Tal y como explicaba, el juez de instrucción, “en 96 folios”, “no es que dijo que no había pruebas, dijo que no había un solo indicio y que todo se había desmontado”. “Y entonces vino la jerarquía [en referencia a la Audiencia de Valencia], y en siete folios dijo: 'Bueno, pero es una hipótesis plausible'”, en palabras de la exvicepresidenta del Consell, quien prosigue visiblemente indignada: “Oiga, una hipótesis plausible es una novela; pero una novela no te puede llevar a un banquillo”.

“Ellos [la Audiencia de Valencia] saben perfectamente, además lo deslizan al final: 'Esta señora se tiene que sentar en el banquillo'”, afirma la exconsellera del Botànic, y añade: “Ya sé que mi pena va a ser sentarme en el banquillo, porque sabéis que no hay nada”. “Entonces, ¿esto de qué va?”, se pregunta Oltra, quien se responde a sí misma: “Esto va de generar duda en un caso en el que la gente esto no se lo cree, porque era muy difícil montarme a mí algo de corrupción y dinero y se deslizaron por un tema que es muy escabroso y que cuesta mucho decir algo en un tema así”.

“Lo montaron muy perfectito, pero cuando hay un juez que en casi cien folios dice que aquí no hay nada, que lleva casi dos años investigando, con 60.000 correos, investigando todo lo que había que investigar y no hay nada; y la respuesta es 'no, pues se va a tener que sentar en el banquillo'”, relata Oltra, para quien la clave de este asunto es seguir generando duda: “A alguien le quedará la duda, y alguien siempre podrá decir cuando otro diga 'pero es mentira': 'Ya, ya, pero se va a sentar en el banquillo'”.