El presidente del Gobierno valenciano, Carlos Mazón, acusó este lunes al ejecutivo de Pedro Sánchez de un intento “deliberado” para “retrasar las ayudas” para las localidades afectadas por la DANA en las primeras horas de la emergencia, en concreto la llegada de especialistas de rescate de la Guardia Civil.
A esta grave acusación se sumó el conseller de Emergencias, Juan Carlos Valderrama, quien consideró “totalmente incomprensible” que el Ejecutivo central “retrasase la movilización y puesta a disposición de la población afectada recursos altamente especializados” como el Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña (GREIM) de la Guardia Civil. “Su actuación es fundamental en salvamento y la búsqueda de desaparecidos, pero también de todos los efectivos de la Guardia Civil a la hora de salvaguardar la seguridad”, añadió.
Unas acusaciones que se contradicen con los datos oficiales, pero también con las declaraciones del propio Mazón el 1 de noviembre en una comparecencia con el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska en la que agradeció públicamente la incorporación de efectivos de las distintas fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y explicó que conforme se veían las necesidades sobre el terreno, se iban reclamando dotaciones: “Ayer se reclamaron 500, hoy se vuelve a reclamar 500, quiero agradecer la predisposición, conforme se reclaman vienen”.
Pero es que, según datos oficiales a los que ha tenido acceso elDiario.es, además de los 1.000 militares de la Unidad Militar de Emergencias (UME) que se desplegaron de forma progresiva desde la mañana del 29 de octubre para practicar los primeros rescates a partir de las 15.30 horas mientras Mazón comía en El Ventorro, efectivos de seguridad ciudadana y de la Agrupación de Tráfico actuaron tanto evacuando a ciudadanos en las carreteras, como actuando en los pueblos, calles y ríos en un momento presidido por el caos y en el que empezaba a caer la noche. Así, se establecieron numerosos desvíos de tráfico rodado para impedir el acceso de vehículos a la zona más afectada.
Fruto de estas primeras actuaciones se realizaron más de 6.000 rescates y 30.000 auxilios en carretera durante las primeras horas de la DANA, lo que evitó que la tragedia alcanzara proporciones aún mayores.
Al día siguiente, el 30 de octubre, se implementó un refuerzo significativo de todas las unidades especializadas en la búsqueda y rescate de personas en las zonas inundadas, de tal forma que en las primeras 24 horas había desplegados 481 efectivos llegados de fuera de la provincia de Valencia, en apoyo de estas últimas. Entre ellas y tras una primera inspección del jefe de área, se reclutó a 14 efectivos de los GREIM, 10 llegados de Granada y cuatro más de Ontinyent.
Además, desde Valencia se generó un despliegue de 750 efectivos en la zona más afectada, destacando el uso de medios aéreos (helicópteros y avión), drones, el Grupo Espacial de Actividades Subacuáticas (GEAS), el Servicio Cinológico y la Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS).
Este despliegue inicial de primera reacción fue adecuándose (en cuanto a número de efectivos y especialidades) a las circunstancias que se produjeron en cada momento, al objeto de hacer frente a las demandantes necesidades que se sucedían. De esta manera, por ejemplo, se reforzó notablemente la presencia de la ARS para erradicar los actos de pillaje que se produjeron los primeros días. Igualmente, el despliegue de especialistas en criminalística fue determinante para una correcta y ágil identificación de las víctimas mortales que fueron recuperadas durante los dispositivos de búsqueda y rescate.
La Guardia Civil incrementó los días sucesivos su número de efectivos desplegados en las zonas de la provincia de Valencia afectadas por la DANA hasta alcanzar cerca de 5.200 el 4 de noviembre.